La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos mantuvo el ritmo de ajuste de su programa de compra con un nuevo recorte de US$ 10.000 millones.
El estreno de Janet Yellen al frente de la Fed se ha ajustado al guion previsto. El Banco Central decidió por tercera reunión consecutiva recortar sus compras de bonos hasta los US$ 55.000 millones.
Desde que en diciembre comenzara su 'tapering', la Fed ha ajustado su programa en US$ 30.000 millones. De este modo, tras esta reunión las compras de la institución monetaria se dividirán en US$ 25.000 millones en titulaciones hipotecarias y otros 30.000 millones en bonos del Tesoro de EEUU.
El Comité de Mercado Abierto, que dirige la política monetaria estadounidense, informó al concluir su reunión de dos días que ahora considerará "una amplia gama de factores" en sus decisiones sobre el estímulo a la economía, en lugar de fijarse sólo en los índices de desempleo e inflación.
Además, ha eliminado la referencia a una tasa de paro del 6,5% como umbral para comenzar las subidas de tipos de interés.Las tasas siguen ancladas en sus mínimos históricos, entre el 0% y el 0,25%.
Junto con ello, ha reiterado que mantendrá el ajuste en las compras de bonos si mejora el mercado laboral y la inflación se mueve hacia su objetivo del 2%. "Si continuamos reduciendo las compras de bonos a este ritmo, el programa podría finalizar este otoño", ha indicado Yellen en su primera rueda de prensa tras una reunión de la Fed como presidenta del banco central.