La agencia Moody’s puso en revisión la calificación de la deuda de Estados Unidos y dijo que en las próximas semanas podría rebajar la nota de la economía que hasta ahora se consideraba la más segura del mundo. Los legisladores en Washington no han logrado ponerse de acuerdo para elevar el techo de la deuda pública de
US$ 14,3 billones (millones de millones) y podrían empujar al gobierno a un default selectivo.
En un comunicado, la agencia señaló que ve una “creciente posibilidad de que el límite de deuda no sea elevado de manera oportuna, conduciendo a un default sobre las obligaciones del Tesoro”. Moody’s también colocó en revisión las calificaciones de instituciones financieras directamente relacionadas con el gobierno, como Fannie Mae y Freddie Mac.
Estados Unidos, calificado con Aaa desde 1917, fue puesto en revisión por primera vez desde 1995. Una rebaja en la nota, posiblemente a Aa que aún representa grado de inversión, incrementaría los costos de financiamiento, además de dañar a las finanzas públicas y trabaría más a la recuperación económica. A comienzos de junio, Moody’s había dicho que la calificación podría ser revisada si no progresaban las negociaciones para elevar límite de endeudamiento. En tanto, en abril S&P colocó la nota estadounidense con perspectiva negativa, lo que significa que una rebaja es probable dentro de 12 a 18 meses.
El Congreso ha elevado el límite de la deuda nacional en el pasado. Esta vez, sin embargo, las negociaciones se están estancadas entre subir los impuestos y recortar el gasto. “El comunicado de Moody’s es un oportuno recordatorio de la necesidad del Congreso de moverse rápidamente para evitar la moratoria en las obligaciones del país”, dijo Jeffrey A. Goldstein, subsecretario de Finanzas Domésticas del Tesoro. Obama tiene hasta el 2 de agosto para lograr un acuerdo.
El impacto operativo de un default
EEUU era considerado hasta ahora el emisor de deuda más seguro del mundo, porque la Fed puede básicamente imprimir todos los dólares que necesite para pagar. Pero en este caso el default se produciría por un tema legislativo.
Si EEUU perdiera su calificación AAA, no sólo provocaría altos costos para el país, sino que además podría complicar la valorización de casi todos los instrumentos de deuda a nivel global. Esto porque el bono del Tesoro es el referencial contra el cual se mide el riesgo de la mayoría de las inversiones en el planeta. Si el bono del Tesoro cayera en default selectivo (nota D) la curva del diferencial respecto de otros bonos de países emergentes más seguros, como Chile, por ejemplo, se invertiría.