Morgan Stanley tiene previsto
devolver al Gobierno de Estados Unidos los recursos recibidos a través del Plan
de Alivio de Activos Tóxicos (TARP, por sus siglas en inglés) a parir de
mañana. En total, el banco recibió fondos por US$ 10.000 millones.
La semana pasada el Tesoro de EE.UU. dio su autorización a diez grandes bancos
para comenzar a devolver las ayudas prestadas. El propio Morgan Stanley
confirmó que era uno de esos bancos.
La firma de Wall Street también tuvo que someterse semanas
atrás a las pruebas de estrés realizadas por el Gobierno para conocer el estado
de salud de las cuentas de los principales bancos estadounidenses y su
capacidad de resistencia a un posible empeoramiento de la crisis.
Dichas pruebas señalaron que Morgan Stanley necesitaba
ampliar capital por US$ 1.800 millones.
Los inversores de La Bolsa de nueva York parecen satisfechos con los
esfuerzos que está realizando esta entidad y respaldan su decisión de devolver
al Gobierno las ayudas del fondo TARP con alzas superiores al punto porcentual.