La Organización de las Naciones Unidas (ONU) cerrará esta semana "un año difícil" económicamente y empezará 2012 decidida a "hacer más con menos", después de que la Asamblea General aprobara el segundo recorte presupuestario de la historia del organismo al dar luz verde a unas cuentas de US$ 5.150 millones para el próximo bienio.
"Los Gobiernos y los pueblos lo pasan mal en todas partes. Es momento de austeridad financiera global. Es imperativo hacer más con menos", dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, después de que, tras semanas de negociaciones, el organismo aprobara el fin de semana los presupuestos para el período 2012-2013.
Ban reconoció que 2011 había sido "un año especialmente difícil" en materia económica en todo el mundo y reafirmó su compromiso de "sacar el máximo provecho de los recursos, cortar lo que sobra y continuar cumpliendo al mismo tiempo con los cruciales mandatos que Naciones Unidas recibe".
Así reaccionó el secretario general a la aprobación de los presupuestos tras unas negociaciones en las que Estados Unidos y los europeos, afectados por la crisis, presionaron para lograr recortes frente a las demandas de los países en vías de desarrollo por mantener el nivel de dotación.
Las negociaciones presupuestarias están siempre marcadas, según recordaron fuentes diplomáticas, por las discusiones entre países desarrollados, que son quienes más aportan al organismo, y el resto de países, que presionan para que la ONU mantenga el nivel de inversión en programas de desarrollo.
La principal fuente de ingreso de Naciones Unidas son los aportes de los países miembros, que se reparten la carga financiera en función del tamaño de sus economías, lo que explica que los 20 países más ricos del planeta pagan cerca del 90% del presupuesto. Estados Unidos es uno de ellos y asume alrededor del 22% de las cuentas.
El resultado de las negociaciones fue en esta ocasión un acuerdo que dejó los presupuestos en US$ 5.150 millones, por debajo de los US$ 5.410 millones aprobados para 2010-2011 y también levemente inferiores a los US$ 5.197 millones que había propuesto Ban a los Estados miembros el pasado mes de octubre.