El primer ministro francés, François Bayrou, convocará una moción de confianza el 8 de septiembre, poniendo en riesgo la supervivencia de su propio gobierno, en un intento por obligar a los partidos políticos a tomar posición sobre su plan de presupuesto. El anuncio provocó una ola de ventas de activos nacionales.
Bayrou dijo a los periodistas en una conferencia de prensa en París este lunes que el presidente Emmanuel Macron acordó convocar al parlamento nuevamente a sesión anticipadamente para permitir que el gobierno presente su plan y celebre la moción de confianza.
“Sí, es un riesgo, pero el mayor riesgo es no hacer nada”, dijo Bayrou. “No hay salida si no somos valientes”.
El primer ministro enfrenta resistencia a los 44 mil millones de euros (US$ 51 mil millones) en recortes de gastos y subidas de impuestos que considera vitales para evitar un desastre para las finanzas públicas francesas. Estas medidas incluyen la abolición de dos días festivos.
Tanto el partido de extrema izquierda Francia Inconmovible como el de extrema derecha Agrupación Nacional dijeron que votarán para derrocar al gobierno.
"Obviamente votaremos en contra del voto de confianza contra el gobierno de François Bayrou", declaró Marine Le Pen, líder de Agrupación Nacional en una publicación en redes sociales. "François Bayrou claramente no ha comprendido que los franceses son plenamente conscientes de la crisis económica y financiera en la que se encuentra sumido nuestro país tras ocho años de macronismo".
Si la mayoría de los miembros de la Asamblea Nacional vota contra la presentación de Bayrou sobre el presupuesto, este se verá obligado a presentar la dimisión de su gobierno. Agrupación Nacional y Francia Indomable juntas aún no alcanzarían la mayoría en la cámara baja.
Una canasta de acciones de Barclays que contiene las empresas más expuestas a los riesgos internos franceses, incluido el presupuesto del gobierno, cayó 2,9% este lunes.
El diferencial de rendimiento entre los bonos franceses y alemanes a 10 años —un indicador muy seguido del riesgo francés— se amplió cinco puntos básicos (pb) a 75 pb, cerrando en el nivel más alto desde abril.
Popularidad de Bayrou a la baja
Bayrou presentó un avance de su presupuesto para 2026 en julio con el objetivo de obtener apoyo durante las vacaciones de verano (boreal). Se aseguró de no tomar vacaciones, permaneciendo en París y lanzando un canal de YouTube llamado "FB Direct" para explicar sus decisiones fiscales y de gasto.
Pero sus esfuerzos han servido de poco para ganarse a la opinión pública y la popularidad de Bayrou ha caído a mínimos históricos para cualquier primer ministro durante la presidencia de Macron. La controversia ahora corre el riesgo de desbordarse en protestas callejeras, ya que un llamamiento en redes sociales a "bloquearlo todo" el 10 de septiembre ha obtenido el apoyo de varios grupos políticos.
La agitación en Francia desde que Macron convocó elecciones anticipadas en junio de 2024 debilitó la confianza de los inversores, elevando el costo de la financiación del país en comparación con sus pares. El retroceso en los esfuerzos previos para reducir el déficit presupuestario también impulsó oleadas de venta de activos franceses.
“Si el camino que elegimos es fingir que el problema no existe, no escaparemos”, dijo Bayrou. “No escaparemos como Estado y como sociedad porque nuestra libertad y soberanía están en juego”.