Internacional
¿Qué decidirán los líderes europeos en la cumbre para controlar el riesgo de contagio?
El plan debiera apuntar a reducir la carga de deuda griega, fortalecer la banca y reforzar el fondo de rescate.
Por: | Publicado: Miércoles 26 de octubre de 2011 a las 05:00 hrs.
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Por Leonardo Ruiz Pereira
De vuelta en Bruselas para una cumbre de emergencia, los defensores del euro intentarán una vez más controlar el riesgo de contagio de la crisis de deuda soberana. El plan es adoptar una estrategia que reduzca la carga de deuda griega, fortalezca a la banca europea para que soporte las pérdidas de sus bonos y refuerce el fondo de rescate de la eurozona para evitar el contagio al mercado de deuda.
La reunión marca el clímax de seis días de negociaciones entre los ministros de Finanzas, bancos centrales y comerciales, cancilleres y primeros ministros sobre la forma del segundo rescate a Grecia, la recapitalización de la banca y la actualización del fondo de rescate de 440.000 millones de euros (US$ 612.000 millones) en un arma más potente.
La décimo cuarta cumbre en 21 meses comienza con una reunión de los 27 líderes de la Unión Europea a las 6 pm. La verdadera cumbre parte una hora después, cuando sólo queden los jefes de las 17 naciones que utilizan el euro, resolviendo un plan de acción que ya han dicho aún requiere más trabajo.
La cancelación de la reunión de los ministros de Finanzas de la Unión Europea subraya los vacíos del plan. Los jefes financieros ahora se reunirán en alguna fecha después de la cumbre, para trabajar en los detalles técnicos de sus elementos principales, incluyendo respaldar a los bancos y reducir la deuda griega. La fecha límite autoimpuesta para controlar la crisis es la reunión del G20 en Cannes, Francia, el próximo 3 y 4 de noviembre.
Detalles de último minuto
Antes de llegar a Bruselas, algunos líderes tendrán que finiquitar detalles de último minuto. La canciller alemana, Angela Merkel, que representa al mayor contribuyente a los rescates europeos, debe ganar aprobación parlamentaria para su estrategia anti-crisis, mientras el premier italiano, Silvio Berlusconi, enfrenta presiones por más recortes de presupuesto.
Grecia, receptor de 110.000 millones de euros como la primera víctima de la crisis el año pasado, está contando con que los inversionistas de bonos acepten pérdidas “voluntarias” de hasta 60% y que los gobiernos de la eurozona y el FMI que le presten al menos 109.000 millones de euros que le permitan pagar sus cuentas. “Actualmente estamos debatiendo entre 50% y 60% en Europa”, dijo el premier de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker. En tanto, las empresas financieras, representadas por el Instituto de Finanzas Internacionales propusieron un recorte de 40%.
Los líderes de la eurozona además están debatiendo sobre cómo obtener un compromiso del Banco Central Europeo para mantener las compras, sin parecer que están dando órdenes a una entidad políticamente independiente. La participación del BCE es crucial, porque los mecanismos para ampliar el fondo de rescate financiado por el gobierno, el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), no estarán inmediatamente listos después de la cumbre y tal vez no tengan suficiente poder.
Las conversaciones de impulsar los 440.000 millones de euros del FEEF se han centrado en dos modelos: usarlo para asegurar ventas de bonos y para financiar un vehículo de inversión especial para atraer dinero externo, incluso del FMI. También se consideró incluir una cláusula sobre el fondo permanente, el Mecanismo Estabilidad Europea, que limita los préstamos entre la transición de los dos fondos en 500.000 millones de euros.
De vuelta en Bruselas para una cumbre de emergencia, los defensores del euro intentarán una vez más controlar el riesgo de contagio de la crisis de deuda soberana. El plan es adoptar una estrategia que reduzca la carga de deuda griega, fortalezca a la banca europea para que soporte las pérdidas de sus bonos y refuerce el fondo de rescate de la eurozona para evitar el contagio al mercado de deuda.
La reunión marca el clímax de seis días de negociaciones entre los ministros de Finanzas, bancos centrales y comerciales, cancilleres y primeros ministros sobre la forma del segundo rescate a Grecia, la recapitalización de la banca y la actualización del fondo de rescate de 440.000 millones de euros (US$ 612.000 millones) en un arma más potente.
La décimo cuarta cumbre en 21 meses comienza con una reunión de los 27 líderes de la Unión Europea a las 6 pm. La verdadera cumbre parte una hora después, cuando sólo queden los jefes de las 17 naciones que utilizan el euro, resolviendo un plan de acción que ya han dicho aún requiere más trabajo.
La cancelación de la reunión de los ministros de Finanzas de la Unión Europea subraya los vacíos del plan. Los jefes financieros ahora se reunirán en alguna fecha después de la cumbre, para trabajar en los detalles técnicos de sus elementos principales, incluyendo respaldar a los bancos y reducir la deuda griega. La fecha límite autoimpuesta para controlar la crisis es la reunión del G20 en Cannes, Francia, el próximo 3 y 4 de noviembre.
Detalles de último minuto
Antes de llegar a Bruselas, algunos líderes tendrán que finiquitar detalles de último minuto. La canciller alemana, Angela Merkel, que representa al mayor contribuyente a los rescates europeos, debe ganar aprobación parlamentaria para su estrategia anti-crisis, mientras el premier italiano, Silvio Berlusconi, enfrenta presiones por más recortes de presupuesto.
Grecia, receptor de 110.000 millones de euros como la primera víctima de la crisis el año pasado, está contando con que los inversionistas de bonos acepten pérdidas “voluntarias” de hasta 60% y que los gobiernos de la eurozona y el FMI que le presten al menos 109.000 millones de euros que le permitan pagar sus cuentas. “Actualmente estamos debatiendo entre 50% y 60% en Europa”, dijo el premier de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker. En tanto, las empresas financieras, representadas por el Instituto de Finanzas Internacionales propusieron un recorte de 40%.
Los líderes de la eurozona además están debatiendo sobre cómo obtener un compromiso del Banco Central Europeo para mantener las compras, sin parecer que están dando órdenes a una entidad políticamente independiente. La participación del BCE es crucial, porque los mecanismos para ampliar el fondo de rescate financiado por el gobierno, el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), no estarán inmediatamente listos después de la cumbre y tal vez no tengan suficiente poder.
Las conversaciones de impulsar los 440.000 millones de euros del FEEF se han centrado en dos modelos: usarlo para asegurar ventas de bonos y para financiar un vehículo de inversión especial para atraer dinero externo, incluso del FMI. También se consideró incluir una cláusula sobre el fondo permanente, el Mecanismo Estabilidad Europea, que limita los préstamos entre la transición de los dos fondos en 500.000 millones de euros.