El fabricante automovilístico francés Reanault anunció hoy que recuperará su marca Alpine para desarrollar en Francia vehículos deportivos, de la mano de la escudería británica de Fórmula Uno Caterham.
Para ello, la marca del rombo cederá el 50% de la empresa Automobiles Alpine Renault a Caterham en el marco de un programa conjunto de ingeniería con base en Dieppe, en el departamento francés de Seine-Maritime (noroeste).
La nueva empresa, que empezará a funcionar a partir de enero de 2013, estará dirigida por Bernard Ollivier, explicó en conferencia de prensa el presidente de Renault, Carlos Ghosn, quien espera que los primeros vehículos lleguen al mercado en "tres o cuatro años".
El acuerdo se basará en la colaboración de la empresa francesa y la británica en el campeonato del mundo de monoplazas, donde Caterham compite con motor Renault bajo la marca Caterham F1 Team -antes Team Lotus- propiedad del fundador de la aerolínea Air Aisa, el malayo Tony Fernandes.
Cabe destacar que Renault y Caterham desarrollarán y comercializarán sus vehículos independientemente.
"Cada uno tiene el objetivo de lanzar su propio vehículo al mercado en tres o cuatro años", sintetizó Renault en una nota de prensa en la que precisó que ambas compañías compartirán un departamento común de ingeniería.
Se trata de una estrategia que busca instalarse en el "importante" mercado de los vehículos deportivos que, según Renault, gozará de una progresión del 15% en Europa en el horizonte de 2015, señaló Goshn, quien no avanzó detalles sobre los modelos, sus precios y el futuro volumen de producción.
"Hoy no queremos hablar del producto porque no queremos encarcelar a nuestros ingenieros" y "preferimos que tengan mucho margen de maniobra", subrayó Ghosn, quien se limitó a decir que el nuevo vehículo será "moderno y competitivo, pero ligado también a su historia".