Rusia afirmó hoy que no participará en una operación militar en Libia, después de que el Consejo de Seguridad de la ONU diera luz verde al uso de la fuerza contra el régimen de Muamar al Gadafi.
"Eso está descartado", aseguró hoy el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, Nikolái Makárov, a la agencia Interfax.
La aprobación para imponer una zona de exclusión aérea no se vio obstaculizada por Rusia y China, miembros permanentes que podrían haber vetado la medida, ya que ambos países optaron por la abstención junto con Brasil, India y Alemania, mientras que el resto de los 15 integrantes del máximo órgano de seguridad la apoyaron.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, declaró previamente que su país apoya "consecuente y firmemente la garantía sin reservas de la seguridad de la población civil" y que por eso Moscú "no puso obstáculos a la aprobación de la resolución".
"Sin embargo, estoy convencido de que el camino más corto para garantizar la seguridad de la población civil y para estabilizar la situación en Libia a largo plazo es el inmediato alto el fuego", señaló.