El Banco de
China, una de las cuatro grandes entidades estatales del gigante asiático,
descartó la posibilidad de que la segunda potencia mundial se sume al recién
aprobado plan Basilea III para la banca, pero reconoció la necesidad de
reestructurar completamente este sector en el país.
"Los
bancos comerciales chinos necesitarían reestructurar su gestión interna y sería
prematuro vaticinar cuándo empezarán a adoptar las reglas de Basilea III, ya
que China todavía no ha introducido Basilea II", admitió hoy Xiao Gang,
presidente del Banco de China.
El
dirigente realizó estas observaciones durante una conferencia en la primera
jornada del Foro Económico Mundial (FEM) de Tianjin (noreste de China), una
reunión anual que se conoce como el "Davos de Asia".
Los jefes
de los bancos centrales y las autoridades reguladoras de 27 países acordaron
ayer, domingo, endurecer las normas de solvencia bancaria con el fin de mejorar
la solidez del sistema financiero, un paquete bautizado como Basilea III.
La nuevas
reglas, que exigen de la banca guardar más capital para hacer frente a
turbulencias como las de la reciente crisis financiera, deberán ser discutidas
y aprobadas durante la próxima cumbre de jefes de Estado y Gobierno del G20 que
se celebrará en la capital de Corea del Sur el próximo noviembre.
El punto
principal del acuerdo obliga a los bancos a mantener un "Tier 1" o
"Nivel 1" (un ratio que mide la fortaleza de las entidades
financieras basándose en su capital básico) del 6 por ciento, frente al 4 por
ciento actual.