El gobierno ingresó una serie de indicaciones al Proyecto de Ley que crea la Comisión de Valores y Seguros, que reemplazará a la actual Superintendencia del ramo.
Se trata de modificaciones en las que se refuerza el rol directivo de la entidad, se norma el régimen de remuneración de sus integrantes, además de establecer el régimen laboral de los funcionarios de la nueva institucionalidad.
En términos particulares, las indicaciones plantean la obligación de realizar a lo menos sesiones ordinarias una vez por semana, más sesiones extraordinarias cuando las cite el presidente de la instancia o por petición de dos miembros de los comisionados.
Asimismo, una mención especial de las indicaciones del Ejecutivo se refiere a los posibles conflictos de interés de los integrantes de la Comisión. Aquí plantea que los consejeros "deberán abstenerse de votar cuando en la sesión respectiva se traten o resuelvan asuntos que los involucren, o materias en que puedan tener interés, debiendo además informar o revelar al Consejo el conflicto de intereses que les afecta"
En cuanto al rol de la Fiscalía de la entidad, las indicaciones plantean que "el Fiscal tendrá en cuenta los sistemas de supervisión definidos por la Comisión para cada una de las entidades fiscalizadas por ella".
Adicionalmente, las indicaciones establecen un incremento de la remuneración para los comisionados. Esto es, pasar del 50% al 75% al equivalente de la remuneración del presidente de la instancia, que, a su vez, se equipara a la de los superintendentes del sector financiero.
De esta forma, un informe financiero elaborado por el Ministerio de Hacienda y firmado por la directora de Presupuestos, Rosanna Costa, estimó en $ 87.175.000 el mayor gasto fiscal "correspondiente al incremento de las remuneraciones de los cuatro comisionados".