por maximiliano villena
A sólo un par de meses que el holding Cencosud recibiera autorización del gobierno peruano para formar su banco, la compañía ya tiene varias novedades para lo que será su aterrizaje en el negocio financiero. El holding de Horst Paulmann puso a la cabeza de la unidad de retail financiero en ese país a Mario Campodónico, que hace un par de días deslizó parte de los planes iniciales del grupo en estas lides.
Lo primero que contó fue que la intención de la firma es aterrizar de lleno con su negocio en el último trimestre de este año. La idea, sostiene, es que el proyecto bancario de la cadena se trabaje en paralelo a la puesta en marcha de su propia tarjeta de crédito. Y en eso ya echaron a andar la máquina, porque en julio del año pasado lanzaron la nueva tarjeta Metro y ahora, hace muy poco, iniciaron un piloto de tarjetas con la otra cadena de supermercados que manejan en Perú: Wong.
En la compañía contaron que esta marcha blanca de la tarjeta Wong se comenzó a realizar en la sureña ciudad de Arequipa, a través de una alianza con Visa, que en los próximos meses replicarán en la capital, donde está el fuerte de los negocios del grupo.
“El Banco Cencosud y sus tarjetas de crédito nacen con el objetivo de ampliar nuestra oferta de servicios y generar valor para nuestros clientes, a fin de atender sus necesidades de financiamiento y convertir nuestras tarjetas en el principal medio de pago para la cadena”, dijo Campodónico la semana pasada a medios de prensa peruanos. Con esto, la firma pretende imitar lo que ha hecho en otros mercados, en que la principal forma de pago en sus distintos negocios es a través de la tarjeta propia.
Perspectivas de mercado
El escenario con que se enfrentará la compañía es más que propicio. Basta ver lo que han logrado sus principales competidores chilenos - Falabella y Ripley- en el segmento de crédito, donde actualmente tienen una posición preponderante principalmente en lo que a créditos a personas se refiere.
Los datos que exhibe la Superintendencia de Bancos de ese país muestran que a marzo, Banco Falabella contaba con 1,13 millones de tarjetas de crédito habilitadas, transformándose así en la entidad número uno en el segmento, seguida por Banco Ripley con 1,07 millones. Estas instituciones aparecen en ese ranking incluso por encima de bancos consolidados, como Interbank, que maneja 1,05 millones de plásticos, o el Banco de Crédito del Perú, que figura con 677 mil unidades. Claro que es justo decir que en términos de montos -y considerando todos los préstamos- las firmas chilenas tienen una participación muy menor.
Esta supremacía se explica porque las retailers chilenas han profundizado su llegada dando acceso al crédito a personas que habitualmente la banca no atendía. Muy en la línea de lo que hicieron también en Chile a partir de los ‘90.
De ahí que la oportunidad de crecimiento sea todavía muy amplia, sobre todo si consideramos que el país vecino tiene una población que casi duplica en tamaño a la chilena.
Espacio para crecer
Al hablar de estas oportunidad, el experto de Fitch Ratings, Abraham Martínez, dice que el mercado peruano tiene un grado de sofisticación y profundización financiera mucho más bajo que Chile, por lo que admite niveles de márgenes más grandes por su riesgo soberano. “Sin duda es un mercado interesante para las empresas que están allá”, describe.
El espacio para crecer no es menor. En Perú las colocaciones sobre el PIB llegaron a 21,94% en 2008, mientras que en Chile el indicador es de 74,5% siendo el segundo país de Latinoamérica con la mayor profundización de sistema financiero, luego de Panamá con 169,91%.
En particular el crecimiento en consumo podría experimentar una importante expansión. De acuerdo a los datos de una presentación que realizó Ripley en julio de 2010, los créditos de dicho segmento podrían lograr una penetración de 9,6% sobre el PIB en 2014, sobrepasando ampliamente el 5% alcanzado en 2008. Y agrega que Perú experimentará un desarrollo similar al de Chile, donde este tipo de préstamos llegó a una profundidad de 9,6% en 2004.
De lo que viene, Campodónico pone énfasis en que tienen como meta en una primera etapa posicionar las tarjetas del grupo como la propuesta más atractiva para el consumo al interior los formatos del grupo, apalancándose fuertemente en el reconociento que tienen sus dos cadenas de supermercados, con una oferta de productos y servicios con condiciones preferentes.
El negocio financiero de Cencosud se ha desarrollado con fuerza en Chile, donde maneja unas 2,5 millones de tarjetas, mientras que en Argentina apenas tiene unos 400 mil plásticos y en Brasil unos 900 mil, por lo que Perú sería el país ícono en el que podría hacer crecer con fuerza esta parte de sus negocios.