Wall Street puso fin ayer su racha de tres sesiones de caídas consecutivas y cerró la jornada con leves alzas pese a la advertencia sobre una burbuja tecnológica de cara a una nueva temporada de resultados empresariales.
A juicio de los analistas, existiría una sobrevalorización de las acciones tecnológicas. En este escenario, el Dow Jones de Industriales ganó un 0,06%, hasta las 16.256,14 unidades, mientras que el indicador S&P 500 avanzó un mínimo 0,38%, logrando los 1.851,96 puntos.
Por su parte, el tecnológico Nasdaq subió 0,81% y consiguió los 4.112,99 enteros.
Los indicadores de Wall Street se alejaron de las pérdidas que experimentaron los mercados de Europa que cerraron con bajas cercanas al 2% tras un nuevo clima de tensión entre Rusia y Ucrania ante la posibilidad de que la primera logre la anexión de nuevas regiones ucranianas.
La jornada empezó tímida tras las previsiones divulgadas por el Fondo Monetario Internacional, que recortó una décima su esperanza de crecimiento mundial para este año hasta 3,6%, aunque los inversionistas parecieron centrarse en que EEUU mantiene las buenas cifras.
Mientras tanto, en los mercados se quedaron esperando la nueva tanda de cifras empresariales que empezó, como es tradicional, con el gigante del aluminio Alcoa. Al cerrar la sesión, esta empresa ganaba 0,48% y tras saberse que sus resultados no fueron tan malos, las operaciones electrónicas posteriores se disparaban hasta 3%.