La Bolsa de Tokio cerró hoy en su
máximo en
un mes tras subir más de 2%, en un ambiente de optimismo
después de la decisión de China de permitir una flexibilización
gradual del tipo de cambio del yuan.
El selectivo Nikkei se
apuntó 242,99 puntos, un 2,43%,
y cerró en 10.238,01 enteros, por encima de la barrera psicológica
de los 10.000 que había llegado a tocar temporalmente la semana
pasada.
El índice Topix, que agrupa a todos los valores de la
primera
sección, ganó 17,85 puntos, un 2,01%, hasta 902,49
enteros.
Prácticamente todos los sectores del parqué tokiota
terminaron en
positivo, liderados por las ventas al por mayor, el transporte
marítimo y la industria de hierro y acero.
Los únicos que
concluyeron en números rojos fueron el sector de
las aseguradores y el de gas y electricidad.
Los índices se
movieron al alza con fuerza desde los primeros
compases de la negociación, animados por la esperanza de que una
gradual flexibilización del tipo de cambio del yuan contribuya
equilibrar la economía global y reforzar las exportaciones niponas.
La
moneda nipona, el yen, se mantuvo estable frente al dólar, que
se movió en la banda alta de las 90 unidades, mientras el euro lo
hizo en la de los 113 yenes.
"El mercado parece estar mirando al
efecto positivo (de la
flexibilización del yuan) sobre la economía", consideró Hideaki
Higashi, analista de SMBC Friend Securities, consultado por la
agencia Kyodo.