La agencia internacional de medición de
riesgo Standard & Poor's (S&P) mantuvo hoy invariable la
calificación crediticia del Banco Santander tras anunciar la compra
de la parte que aún no poseía en el estadounidense Sovereign, el
75,65% del capital.
En un comunicado divulgado desde su sede en Londres, S&P dijo que
las calificaciones continuaban siendo "AA" y "A-1+", con perspectiva
estable.
La nueva adquisición, por US$1.900 millones (unos 1.400
millones de euros), "proporcionará al Santander una buena entrada"
en unos pocos estados del este de Estados Unidos, subrayó la agencia.
Además, "su tamaño e impacto en el capital será relativamente
pequeño para el Santander", añadió.
El banco presidido por Emilio Botín, el mayor banco por activos
en España y unos de los diez primeros del mundo, adquirió, en los
últimos tres años, más del 24% del banco estadounidense.
Esta circunstancia, a juicio de S&P, limita los riesgos porque
"el Santander ya tiene un buen conocimiento del banco
estadounidense".
Según el acuerdo definitivo de la operación, los accionistas de
Sovereign recibirán 0,2924 títulos American Depository Shares (ADS)
de Santander por cada acción ordinaria de Sovereign que posean (o 1
acción de Santander por cada 3,42 acciones de Sovereign).