En los últimos días, el mayor holding de salud del país fue adquirido por el mayor gestor de activos alternativos de América Latina. Así, detrás de Empresas Banmédica estará Patria Investments, y tras esta un centenar de inversionistas, entre ellos quienes fueron sus dueños seis años atrás.
Los US$ 800 millones que desembolsará Patria Investments por Banmédica le harán quedarse con isapre Vida Tres, una amplia red de clínicas en Chile (incluyendo Clínica Santa María y Dávila), además de negocios de salud en Colombia.
La estructura de fondos con la que Patria entraría a Banmédica será a través del fondo Private Equity Fund VII (PE VII) de la gestora brasileña, lanzado en 2022. Este será el vehículo “madre” y su protagonismo es tal, que fue la contraparte que selló el contrato de compraventa con UnitedHealth Group.
Pese a que el proceso se encuentra en plena estructuración, se espera que detrás de PE VII irán más fondos. Entre ellos destacan principalmente Linzor y sus aportantes; por otro, inversionistas que entrarían directamente como coinversores; y también el fondo chileno Moneda PIPE, administrado por la oficina local de Patria.
Moneda vuelve al Private Equity
El fondo PIPE -creado en 2024- es dirigido por el emblemático fundador de Moneda, Pablo Echeverría, quien es portfolio manager del fondo junto a Edgardo Gutiérrez. El fondo, tal como dicen sus iniciales en inglés (Private Investment in Public Equity), puede invertir tanto en empresas listadas en bolsa como en aquellas cerradas, lo que le da mayor holgura a la hora de elegir dónde invertir.
El vehículo se creó hace más de un año; sin embargo, debutó a comienzos de 2025 cuando desembolsó alrededor de US$ 25 millones para ingresar a la propiedad de la empresa estadounidense AgroVision Corp -hoy renombrada Fruitist-, dedicada a la tecnología agrícola y enfocada en los berries.
Ahora, tras sumar a Banmédica como segundo activo a la cartera, los originales aportantes también pasarán a ser inversionistas indirectos del holding de salud, y entre ellos figuran justamente los compañías ligadas a los exdueños de Banmédica: Grupo Penta —ligado a Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín — y Consorcio — donde el grupo Fernández León es uno de los controladores—.
Según el registro de aportantes de la CMF, actualmente Consorcio Seguros de Vida cuenta con el 11,7% del PIPE y Grupo Penta con el 15% —a través de Penta Vida y Empresas Penta—. Junto a ellos, también figuran como aportantes la Compañía de Seguros Confuturo con el 5,4%.
Pese a su elevada participación en el vehículo administrado por Moneda, la participación en Banmédica sería considerablemente menor. Se estima que PIPE obtenga alrededor del 10% del total de Banmédica, por lo que sus posiciones finales oscilarán alrededor del 1%.
Aunque eso podría tener un vuelco. Moneda Patria también le dió a sus aportantes la opción prioritaria para entrar como coinversionistas a Banmédica, por lo que su participación podría ir más allá de PIPE.
Un regreso, pero sin protagonismo
El ingreso formal de Penta a Banmédica ocurrió en el año 2000, cuando se fusionaron dos sociedades vinculadas a Penta dentro de Banmédica. Como resultado, la firma ligada a Délano y Lavín pasó a tomar el 26,7% de la propiedad. Por su lado, el grupo del empresario Eduardo Fernández León ya había adquirido en los ’90 una porción significativa de Banmédica, por lo que con la incorporación de la firma de Délano ambos grupos consolidaron el control conjunto de la empresa.
Este acuerdo accionario Penta–Fernández resultó estable en el tiempo, y hacia 2019 cada grupo poseía aproximadamente 28,7% de Banmédica, ejerciendo en conjunto la mayoría. Ese año UnitedHealth Group compró Banmédica por US$ 2.800 millones, y el 57,5% que ostentaban Délano y Fernández le hicieron recibir unos US$ 1.600 millones por la transacción.
A seis años del adiós de los emblemáticos empresarios, cercanos a las familias reconocen que fue una casualidad de la vida su regreso a la compañía. Explican que ambos son aportantes de un fondo que se estructuró antes de que Banmédica saliera a la venta, por lo que en sus proyecciones jamás estuvo ingresar a la propiedad.
Sin embargo, esto no quita que vean con optimismo la reciente transacción . Que el precio de compra sea alrededor de tres veces mayor al que vendieron les dejó un sabor dulce.
“Vendieron bien y compraron barato de vuelta”, afirma un cercano a las familias.
La misma fuente agrega que claramente el negocio es prometedor: “Hay que pasar el temporal de la isapre y con el nuevo gobierno eso se ve más factible. En cuanto al negocio de las clínicas es bueno, ya que no tiene casi nada de deudas lo que les entrega mucho margen de maniobra”.
Institucionales extranjeros
El grueso de los inversionistas vendría a través del PE VII. Tal como dice su nombre, es el séptimo fondo especializado en private equity de la gestora y su origen se da en 2021, cuando la firma ratifica su tesis de inversión en América Latina.
La apuesta era que la región tendría un ciclo interesante de consolidación post-pandemia, especialmente en Brasil, Chile y Colombia. Por eso el PE VII se concibió como un fondo multipaís, distinto a vehículos antiguos que eran predominantemente brasileños. El objetivo era apostar por “sectores esenciales” como alimentación, fertilizantes, salud y servicios básicos.
Con años de recorrido, el fondo ya tiene entre sus aportantes reconocidos actores. Entre ellos destacan el fondo de pensiones del Estado de Amazonas (Amazonprev) y el fondo de pensiones municipal de São Paulo (GuarujáPrev). También, se ha señalado a fondos pensiones de mercados desarrollados y endowments, entre otros institucionales.
Banmédica no es el debut para el fondo. PE VII también cuenta con el 50% de Delly’s Food Service, la compañía líder en distribución de productos alimenticios en Brasil; el fabricante M.F. Fertilizantes, donde en 2023 Patria adquirió el 85%; y la empresa de biotecnología Microgeo, donde entró en 2022.