Corrupción en Perú continúa perjudicando a Ollanta Humala

Un caso que involucra a la fuerza policial y un empresario está golpeando la ya baja aprobación del presidente.

Por: | Publicado: Viernes 22 de noviembre de 2013 a las 05:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Un escándalo que ya cobró el puesto del ministro del Interior ha expuesto nuevamente los serios problemas de corrupción que involucran a las fuerzas de seguridad y las debilidades institucionales endémicas de Perú.

Además, la controversia no está mostrando señales de mejora desde que llegó a los titulares a mediados de noviembre y es probable que pese en la ya baja aprobación del presidente Ollana Humala, justo cuando estaba empezando a mostrar señales de recuperación.

El 19 de noviembre el ex embajador peruano en la Organización de los Estados Americanos (OEA), Walter Albán Peralta, juró como ministro del Interior. Reemplazó a Wilfredo Pedraza, quien fue obligado a renunciar cuando se supo que Óscar López Meneses, un hombre de negocios condenado y asociado de Vladimiro Montesinos -el espía jefe del ex presidente preso, Alberto Fujimori (1990-2000)-, estaba recibiendo protección policial. Junto con Fujimori, Montesinos está actualmente en prisión cumpliendo una larga sentencia por cargos que incluyen malversación, conspiración y corrupción.



Corrupción en fuerzas de seguridad


El caso está mostrando el serio problema de corrupción en las fuerzas de seguridad. En un momento en el que las preocupaciones públicas sobre la seguridad están creciendo, esto está atado a una profunda frustración pública con el gobierno y una falta de confianza en la policía.

El momento de esta nueva crisis ha sido también particularmente dañino para Humala, quien recién estaba empezando a ver mejoras en los niveles de respaldo público después de designar un nuevo jefe de gabinete (el tercero desde que empezó su mandato), César Villanueva, a principios de mes.

Ciertamente, el caso podría también ser fundamental para la propia autoridad y credibilidad de Villanueva. Aunque la llegada de Albán al ministerio del Interior ocurre en un contexto altamente negativo, también representa una oportunidad para Villanueva y su equipo de partir en una clara dirección y redefinir las prioridades en la administración en relación con la corrupción y la seguridad pública.

Esto podría conducir a más cambios en el gabinete en un intento de traer renovación al equipo. El ministro de Defensa, Pedro Cateriano, y el almirante José Ernesto Cueto Aservi, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, también podría estar bajo presión, como resultado de los alegatos que estaban vinculados a una decisión de entregar protección policial a López Meneses.



Antecedentes del escándalo


El escándalo primero apareció cuando el periódico peruano, El Comercio, reveló el 13 de noviembre que López Meneses, a quien ya le habían dado una sentencia de cuatro años de suspensión por sus vínculos con Montesinos, contaba con un guardia policial fuera de su casa en la capital, Lima.

A partir de ahí el interés de los medios aumentó rápidamente a medida que creció hasta convertirse en una de las mayores crisis políticas desde que Humala tomó su cargo, forzando al presidente a cancelar una visita oficial a Canadá esta semana para quedarse en Lima. Así como con Pedraza, el caso también ha llevado a la renuncia del consejero de seguridad y defensa de Humala, Adrián Villafuerte, quien supuestamente también tenía tratos con López Meneses. Seis jefes de policía de alto rango también fueron suspendidos por el asunto.

El caso también ha conducido a crecientes tensiones entre la policía y las Fuerzas Armadas sobre quién autoriza en última instancia a la guardia policial.



Implicancias en los rivales


El caso también le proporcionará argumentos a la oposición, particularmente al ex presidente Alan García y su partido, el Partido Aprista Peruano (APRA) y al bloque Fujimorista en el Congreso, en sus esfuerzos por socavar el gobierno de Humala.

Por lo tanto, se espera que el clima político permanezca polarizado en el corto y mediano plazo, en línea con nuestras proyecciones, mientras que los índices de aprobación de la población a Humala se mantendrán en niveles bajos.



Lo más leído