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Allamand asume rol político en la Alianza y Longueira retoma opción presidencial

Transcurridos ya dos días desde los comicios, el ministro vocero Andrés Chadwick se ha reunido con las dos cartas del oficialismo.

Por: | Publicado: Miércoles 31 de octubre de 2012 a las 05:00 hrs.
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Por C. Betancourt / F. Orellana



Días clave se viven en La Moneda. Tras la tormenta desatada tras los resultados de las elecciones municipales, el Ejecutivo reactivó las reuniones que apuntan a una aceleración del esperado cambio de gabinete, que debiera concretarse antes del 11 de noviembre, tal como lo anunció el lunes, el vocero Andrés Chadwick.

Así ya se inició la cuenta regresiva para aquellas autoridades de gobierno que tengan aspiraciones de ser candidatos en las elecciones presidenciales y parlamentarias de 2013. Pero fueron los encuentros del ministro Chadwick con las dos cartas presidenciables de la Alianza, los ministros Laurence Golborne y Andrés Allamand, los que concitaron mayor atención dada la distinta posición en que habrían quedado post elecciones. Según se ha planteado al interior del mismo bloque oficialista, mientras Golborne habría sido perjudicado por su activa participación en la campaña municipal, Allamand estaría capitalizando su “distancia” en el proceso, con una postura reflexiva que lo pone a la vanguardia en la carrera presidencial.

En la misma línea, ayer nuevamente llegó hasta palacio el presidente de la UDI, diputado Patricio Melero, quien se retiró en absoluto silencio profundizando las dudas sobre la fecha de salida de los ministros y los potenciales reemplazantes.

Se ha insistido en que la salida de los presidenciables será definido sólo por el Presidente antes de su viaje a Europa. Todo esto, en medio de recriminaciones mutuas de los partidos oficialistas por los negativos resultados obtenidos en las elecciones, y la disputa por la fecha más apropiada para las salidas: RN postula que debe ser “lo antes posible”, mientras sus socios de la UDI insiste en enero como la fecha ideal.

Allamand y su rol político


De imprevisto y pasadas las 11.00 horas, llegó hasta La Moneda, el ministro de Defensa, Andrés Allamand, para reunirse con el portavoz del gobierno. A su llegada, escuetamente comentó “fui citado” a una reunión que se prolongó por cerca de una hora. A su salida, y en la línea de lo que han sido sus declaraciones post comicios, manifestó que a pesar de que el resultado fue adverso, “el proyecto de centro derecha sigue vigente”, e instando a “no llorar sobre la leche derramada”.

“Si el triunfalismo nos jugó una muy mala pasada en esta elección, sería peor que el derrotismo agravara nuestros males (...) la elección está completamente abierta, nada está escrito; las encuestas no predicen los resultados de las elecciones, y en consecuencia, el proyecto que encarna este gobierno es plenamente competitivo”, fustigó. Asimismo recalcó que la diferencia que existe entre la votación oficialista y la de la Concertación es mínima, de sólo 5 puntos, y que el desafío es apuntar a quienes no concurrieron a votar el domingo. “Hay un 60% de ciudadanos que son precisamente la ciudadanía que es muy importante conquistar”, precisó.

El titular de Defensa subrayó que se debe poner fin a las recriminaciones al interior de la Alianza por los resultados e incluso retrocedió en su emplazamiento al rol que habría jugado Golborne. “Tengo la certeza de que todos los que intervinieron en la elección lo hicieron tratando de que las cosas resultaran de la mejor manera y ciertamente, no tiene ningún sentido continuar o iniciar una serie de recriminaciones entre los partidarios del gobierno y los partidos políticos”, dijo.


Longueira retoma su opción


En tanto, tras varias semanas en que su opción presidencial había quedado congelada, el ministro Pablo Longueira reapareció planteando la necesidad de “repensar de qué forma uno se conecta con la ciudadanía y el electorado”. Y de inmediato recalcó: “En esa estrategia siempre van a contar conmigo, yo tomaré las decisiones en su minuto, creo que no es el minuto aún para tomarla, pero lo importante es que voy a contribuir a ese objetivo”. De paso añadió que “si es útil un desafío presidencial que yo asuma, lo voy a evaluar y estoy dispuesto a hacerlo si es útil y contribuye al éxito (...) si estimo que no es así, no lo voy a asumir. No soy una persona que ande buscando mucho, y muchos lo buscan y les apasiona poder llegar a ser candidato o Presidente de la Republica. No me refiero a nadie en particular, lo considero legítimo”.

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