Con su sentido discurso y rodeado por todo el gabinete, el presidente Sebastián Piñera despidió esta mañana a Harald Beyer tras ser destituido ayer en el Senado de su cargo como ministro de Educación.
En la oportunidad, el presidente de la República condenó la acusación y dijo que se destituyó al ministro menos político del gabinete y el que quizás más vocación de servicio públio tenía.
En el patio de los cañones de La Moneda, el mandatario dijo que no sólo la destitución del secretario de Estado fue injusta, sino los argumentos que permitieron dar luz verde a la acusación constitucional.
"Los argumentos son injustos y están profundamente reñidos con lo que es la letra y el espíritu de nuestra constitución, las leyes y el marco jurídico", dijo el presidente.
Sebastián Piñera dijo que se condenó injustamente a un ministro que hizo "más que cualquier otro ministro" por hacer cumplir las leyes y por hacer que el Ministerio de Educación cumpliera con sus deberes.
El mandatario apuntó luego sus dardos contra los senadores que votaron a favor de la acusación constitucional.
" Yo sé que algunos senadores acusadores no tuvieron una noche tranquila ayer", dijo Piñera, para luego agregar que si dichos parlamentarios hubieran tenido "libertad", hubieran votado distinto.
"El ministro durmió muy tranquilo porque él sabe y nosotros samebos que durante sus 15 meses actuó siempre de manera honesta, transparente y con una sola mision: mejoirar la calidad y equidad de la educaciuón", agregó.