A días de iniciarse la veda informativa para las encuestas y luego de la sorpresa que produjo el resultado de la elecciones legislativas en Argentina, donde el presidente Javier Milei se impuso, el invitado del nuevo episodio de la Cadem en el Diario Financiero, fue el abogado y columnista Axel Kaiser, desde la ciudad de Tucumán, al otro lado de la cordillera.
Dada esa afortunada coyuntura aprovechamos además para analizar el resultado de las elecciones en ese país, que favorecieron al gobierno de Javier Milei.
Consultado el columnista –que se declara amigo del mandatario argentino– a qué atribuye el inesperado triunfo del gobierno libertario, apuntó en,
primer lugar, a que en Argentina, con Milei, se produjo una “revolución cultural”, que atrajo principalmente a la gente joven, pero que se ha expandido hacia un alto porcentaje de personas que vota por la Libertad Avanza.
A eso se sumaría también la “energía y entusiasmo que hubo en la campaña” y, en menor grado, habría influido el respaldo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al mandatario argentino, aunque destacó que Milei tuvo el mérito de haber cultivado esa relación.
Kaiser restó importancia a la baja participación en el proceso, señalando que el ausentismo electoral se puede interpretar de distintas maneras, aunque admitió que pudo haber algo de decepción, pero vaticinó que “en la presidencial de 2027 Milei va a salir electo”. Y adelantó que a partir de este triunfo, para Milei, vienen las reformas estructurales, como las reformas laboral y tributaria, para lo cual va a buscar alianzas más extendidas en el Congreso.
Aterrizando el debate a Chile
Desde el punto de vista del columnista, en Chile se requiere “un consenso amplio que, obviamente, son todos los grupos políticos menos los golpistas del 18/10, que es el Frente Amplio (FA), el Partido Comunista (PC) y grupos de esa naturaleza, para sacar al país adelante”. Porque, subraya, debe haber unidad para resolver graves problemas y generar reformas que le permitan al país salir adelante.
En este sentido, la falta de unidad en la derecha, se genera en algunos casos por “cosmovisiones distintas, que a mí me preocupan más en Chile Vamos”, advirtió. Sobre este tema se explayó, explicando que en Chile Vamos, “encuentro que, a veces, son más antiderecha que antiizquierda” y añadió que “se sienten casi más cómodos negociando y conversando con la izquierda que con la derecha, sectores de Chile Vamos. Y eso, que es una pose, al final, un poco para verse como 'nosotros somos demócratas' y como la izquierda te reparte la licencia de quién es demócrata y quién no, entonces se sienten cómodos con la izquierda”.
Y especificó aún más, apuntando hacia algunos partidos con nombre y apellido, como “Evópoli, de todas maneras”; pero reconoció que también hay a quienes en los otros partidos de Chile Vamos también “les gusta esta cosa de ‘somos los demócratas, entonces siempre vamos a estar más hacia la izquierda que hacia la derecha'. La amenaza a la democracia es José Antonio Kast y no Boric, con el Frente Amplio y el Partido Comunista’”.
Ese temor de algunos sectores que consideran una amenaza para la democracia a algunos candidatos de la derecha, responde –dice Kaiser– a “una histeria ridícula que viene de la izquierda, que todo lo que no le gusta es fascista, por supuesto, y lamentablemente muchas personas de centroderecha que, en realidad, son más bien de centroizquierda, se compran esto para ponerse la camiseta de la superioridad moral, que ellos también son demócratas y no están dispuestos a bancarse a una persona que es calificada por la izquierda como extrema derecha”.
¿Veto a los emblemáticos del piñerismo?
Por esta razón Kaiser espera que la derecha tenga la altura para no “sabotearse” entre sí, si la presidencial la gana o Kast o su hermano Johannes Kaiser, aunque aclara que cree que será este último el que llegará a La Moneda.
Además, adelantó que si es el libertario quien triunfa "no va a incorporar como ministros a los emblemáticos piñeristas. Eso está claro”, algo que repitió en varias ocasiones. Sin embargo, más adelante echó pie atrás y dijo creer que Evelyn Mathei sería una buena canciller.
El columnista destacó que es su hermano quien transmite más credibilidad, respecto de que sí va a hacer lo que ha comprometido. Desde su punto de vista, a Kast le cuesta más transmitir eso.
Por otro lado, y pensando en la segunda vuelta, dice que Johannes le sacaría por lo menos 10 puntos a la candidata de la centroizquierda Jeannette Jara; y que si esta última llegara a La Moneda “destrozaría completamente al país”.