En su segundo Investor Day, Empresas Copec reafirmó sus dos focos de negocio -energía y recursos naturales-, destacando los avances de sus principales negocios en Perú y Brasil, y también la contingencia. Esta última marcada por factores de mercado, pero también políticos por la reciente elección presidencial en Chile.
"Evidentemente vivimos en un mundo hoy bastante complejo (...) No entiendo el mundo de los negocios sin volatilidad, sin riesgo", dijo de entrada el CEO de la compañía, Eduardo Navarro, quien agregó que hay algunos paradigmas que se daban por hecho y que actualmente se están colocando en cuestionamiento. "Hacer negocios sin lugar a duda hoy es más difícil", remató.
En la cita, se le planteó al timonel de la firma ligada al grupo Angelini que la contracara del crecimiento ha sido un mayor apalancamiento. En medio de grandes proyectos de inversión, Navarro reconoció que están monitoreando este aspecto, pero -dijo- "estamos bien tranquilos". "Nosotros estimamos que probablemente el peak de endeudamiento va a ser el próximo año, del 2026, pero eso lo estamos gestionando y monitoreando con mucho cuidado", detalló.
Precisamente, en el evento expuso el CEO de Marcobre, Luis Sánchez, quien destacó que Mina Justa Subterránea -que involucra una inversión de US$ 500 millones- tendrá una capacidad de extracción del orden de 11 mil toneladas por día a través de túneles, transformándola en la segunda operación más grande subterránea en Perú.
"Actualmente estamos en la fase de definición. Esta fase de definición esperamos terminarla durante el segundo trimestre del próximo año y con eso pasar ya a las etapas finales de ingeniería y posterior construcción", precisó, con miras a que entre en opración a fines del año 2028.
Según explicó, el sistema de permisos en la nación andima es muy similar al de Chile y lo que hacen es obtener los permisos por cada etapa del proyecto. Hoy -dijo- tienen los permisos para poder construir los túneles de exploración. "Nosotros deberíamos estar listos con los permisos en abril, mayo de 2027, y con eso iniciar la construcción ya con los permisos otorgados. Por lo tanto, desde el punto de vista la permisología, yo veo bien avanzado el proceso", aseguró.
Precisó que están financiando el proyecto con capitales propios hasta esta etapa y lo que ven en función de sus perfiles de negocio por los próximos años es que perfectamente podrían cubrirlo con capital propio y también acceso a deuda. Esto, "porque vemos que hay oportunidades relevantes en términos de financiamiento y hay apetito muy fuerte por este tipo de proyecto".
Consultado por posibilidades de expansión más allá de Mina Justa Subterránea, Sánchez detalló que tienen 56 concesiones mineras que pertenecen a Marcobre. "Esas concesiones en términos de área son aproximadamente 67.000 hectáreas y lo que vamos a tener en producción son solo 6.000 o 7.000 hectáreas. Por lo tanto, tenemos un nivel de área para continuar con estas exploraciones muy grande", dijo, agregando que han determinado que tienen un "tremendo potencial" en la actividad de exploraciones que han realizado.
Al respecto, sobre opciones fuera de Mina Justa Subterránea, Navarro comentó: "Seguimos viendo cosas con calma". "El precio del cobre, que es uno de los minerales que hemos identificado como relevante para desarrollar a futuro, hoy está con valoraciones muy altas. Eso significa que vale mucho lo que hacemos, pero también es bastante costoso crecer".
Añadió que "en la zona donde estamos solo el 10% lo hemos estado explorando con buenas probabilidades, con números que son bastante interesantes, pero todavía nos queda mucho que desarrollar en la misma zona donde estamos en Mina Justa, así que habría que partir por ahí".
A futuro, Sánchez reconoció que "lo que estamos viendo hacia los próximos dos o tres años es que el mercado va a estar básicamente en déficit en términos de cobre, y sabemos lo que eso significa desde el punto de vista del impacto que tiene eso en el precio".
Asimismo, indicó que "el peak de la guerra tarifaria lo vimos pasar y lo que se vio básicamente en el mercado fue un movimiento de cobres desde una parte del globo a otro". "Se pensó que el precio podría definitivamente verse afectado, pero lo que vimos es que las fuerzas de largo plazo fueron más relevante que esa incerteza de corto plazo y la fuerza", añadió.
También hubo inquietud por el ambiente político en Perú, principalmente en lo relacionado a la facilidad para llevar a cabo nuevas inversiones de este tipo. En ese caso, dijo Sánchez, "el segundo plano de la política del Perú es mucho más estable que la primera capa. La primera capa, como ustedes ven, varios cambios de presidentes, un sinnúmero de cambios de ministros, pero sin embargo, cuando vamos a hablar con la segunda capa nos damos cuenta que hay bastante resiliencia en los elementos técnicos, en cada una de las disciplinas. Y por otro lado, el Perú cuenta con un Banco Central muy bien equipado, que tiene una moneda que se ha ido apreciando".
Y añadió: "Por lo tanto, independiente de los ciclos políticos y los vientos políticos, esta segunda capa logra que el país avance al ritmo necesario".
En la misma línea, el CEO de Empresas Copec recalcó que tienen que ejecutar el proyecto Sucuriú "en forma impecable".
Iván Chamorro, vicepresidente forestal y de celulosa en Arauco, expuso que están a un ritmo de plantaciones de 65.000 hectáreas por año, lo cual es bien significativo. "Para que tengan una idea, en Chile plantamos del orden de 40.000 hectáreas anuales. En Brasil estamos plantando 65.000 hectáreas anuales", destacó.
El megaproyecto -que involucra US$ 4.600 millones de inversión- tenía un avance de 25,7% a septiembre y de 32,1% a octubre. Esta útima cifra implica una desviación favorable de 5,1% respecto a lo proyectado. "Va el proyecto avanzando bien, on time, incluso un poco adelantado", dijo Chamorro, aunque no se atrevió a decir si terminarían antes con ese ritmo. Esto, porque reconoció que la etapa más compleja será el próximo año.
Asimismo, valoró que la cooperación público privada es algo que destaca en Brasil: "El ambiente es muy positivo. Hay una convicción de que las empresas son el motor de desarrollo más relevante y que el Estado tiene que jugar un rol de facilitador para que las inversiones se puedan llevar a cabo. Hay exigencias medioambientales muy potentes, igual que en Chile, pero siempre con una actitud de colaboración".
Sobre el precio de la celulosa, dijo que piensan que los peaks bajos de precios ya pasaron.
Elecciones presidenciales
La última pregunta del encuentro, relacionada con las últimas elecciones que vivió el país, fue para Navarro respecto a lo que espera para el ambiente de negocios en Chile en los próximos años. El ejecutivo recalcó que es optimista y que hay razones para serlo, porque hoy en Chile se está cada vez más hablando del crecimiento económico.
"Hay muchas necesidades, pero está claro que hay consenso transversal de que sin crecimiento económico no vamos a dar respuesta a los desafíos sociales que tiene Chile", dijo, calificando como "inaceptable" la tasa de desempelo que tiene hoy el país.
Y lanzó: "Todos queremos que las cosas funcionen mejor. Bueno, levantémonos, hagamos las cosas. Hacer es un verbo. Hacerlas bien es un adjetivo. Hay que hacer cosas. A veces nos preocupamos solamente la bondad de los temas, que las cosas se fiscalizan para que no haya nada malo. Yo creo todos tenemos la obligación de movilizar al país".
Consultado por la excesiva complejidad del conglomerado que critican algunos, Navarro indicó que este es un holding bastante liviano de estructura y eso también ayuda a reducir los costos que pueda tener: "Hoy no hay una agenda relacionada con la estructura de la compañía, pero siempre a futuro pueden haber oportunidades que puedan permitir financiar iniciativas a través de la reestructuración o cosas que hoy día no está en la agenda".
Y aunque no entregó detalles, indicó que siguen avanzando en los procesos de desinversión "tanto de Sonacol, la red de ductos de combustibles líquidos y gas licuado en Chile, y también nuestra participación minoritaria en el gas natural o Metrogas".