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La Polar debe recomprar millonaria cartera a BCI Securitizadora
La filial bancaria compró a la compañía una cartera con la que emitiría un bono securitizado, pero la operación fracasó.
Por: | Publicado: Sábado 18 de junio de 2011 a las 05:00 hrs.
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Por Maximiliano Villena
No sólo la colocación privada de efectos de comercio ha causado escozor en la banca. Durante este año La Polar se preparaba para emitir otro bono securitizado. Parte de los detalles estaban resueltos y a fines de 2010 se realizó el acopio de la cartera.
Bci Securitizadora compró ese paquete pero el proceso, mucho antes de conocerse la situación de la compañía, se paralizó. Tras el fracaso de la emisión, dicha cartera debe ser recomprada por la multitienda, lo que además reduce la exposición de BCI a ella.
Fuentes conocedoras de la materia señalan que esa cartera de $ 20.000 millones no es deuda, sino un activo subyacente que está reflejado en los pasivos que informa La Polar en su FECU como si lo fuera, pero en realidad es un acopio para generar un patrimonio separado. Por ende, no es una deuda afecta a provisión.
Con esto, la deuda financiera de La Polar con Bci sería de alrededor de $ 30.000 millones y no de de $ 50.000 millones.
El problema, señalan desde el mercado, es que se desconoce si la cartera que compró es buena. “La Polar tiene que recomprar la cartera, pero no se sabe cómo, porque no tiene cómo conseguir el dinero”, señala la misma fuente.
El total de la deuda bancaria de la multitenda (contabilizando esa cartera) llega a US$ 298 millones.
Las compras de Penta y Consorcio
El pasado 3 de junio, 6 días antes que estallara la crisis, el retailer realizó una colocación privada de efectos de comercio por $ 60.000 millones.
La operación fue intermediada por LarrainVial y cuyos papeles fueron adquiridos por clientes de esa corredora e instituciones como Penta y Consorcio.
El banco, ligado a Carlos Alberto Délano, anunció que destinará US$ 11 millones para borrar el impacto de esta compra en sus fondos mutuos.
Desde Consorcio trascendió que adquirieron estos títulos con patrimonio propio y que fuguran entre sus activos, por lo que no se generaron efectos sobre sus clientes.
