Por segundo día consecutivo, Delta Airlines canceló ayer cientos de vuelos mientras intentaba restaurar sus operaciones que fueron afectadas por un colapso generalizado en sus sistemas electrónicos.
Según informó la firma, al menos 300 vuelos fueron suspendidos durante la mañana, una cifra mayor a la estimada de 250, mientras intentaba reacomodar a sus clientes en plenas vacaciones de verano y determinar exactamente qué estaría afectando las operaciones.
“Fuimos capaces de recuperar nuestros sistemas y reanudar los vuelos en pocas horas ayer (el lunes) pero aún estamos operando en modalidad de recuperación”, dijo el vicepresidente de operaciones de la segunda aerolínea más grande de Estados Unidos, Dave Holtz, en un comunicado. Sin embargo anunció que todavía se esperaban nuevos inconvenientes: “estamos haciendo todo para retomar la normalidad pero sí esperamos retrasos y cancelaciones adicionales”.
El lunes, la operadora había anulado alrededor de 1.000 vuelos dejando varados a miles de pasajeros en aeropuertos alrededor del mundo, luego de que se generara un corte de energía eléctrica en sus oficinas centrales de Atlanta.
Disculpas
El director ejecutivo de Delta, Ed Bastian, emitió un video a través de la página web de la empresa para pedir disculpas a los clientes y asegurar que trabajan contrarreloj para restablecer sus sistemas.
Además, la compañía anunció que ofrecería reembolsos y compensaciones de US$ 200 en bonos de viaje a todos los usuarios que experimentaran retrasos mayores a tres horas o que tuviesen su vuelo anulado.
Aerolíneas rivales, Southwest Airlines y American Airlines, también reportaron suspensiones por mal funcionamiento de sus sistemas.
Las acciones de Delta cerraron ayer con un descenso de 0,77% a US$ 37,15.