Elon Musk, máximo ejecutivo de Tesla, ha anunciado que el fabricante de automóviles estadounidense ha firmado un acuerdo por valor de US$ 16.500 millones para adquirir chips de Samsung Electronics, una operación que se espera refuerce el deficitario negocio de fabricación por contrato del gigante tecnológico surcoreano.
Las acciones de Samsung subían hasta un 6,8% y alcanzaron su nivel más alto desde septiembre del año pasado tras conocerse la noticia del acuerdo.
Musk dijo que la nueva fábrica de chips de Samsung en Taylor, Texas, fabricará el chip AI6 de próxima generación de Tesla, lo que podría reactivar el proyecto, que ha sufrido grandes retrasos debido a las dificultades de Samsung para retener y atraer a clientes importantes.
"Samsung aceptó que Tesla le ayudara a maximizar la eficiencia de la fabricación. Este es un punto crítico, ya que recorreré la línea personalmente para acelerar el ritmo de progreso. Y la fábrica está convenientemente situada no muy lejos de mi casa", dijo Musk en una publicación en la red social X el lunes.
"La cifra de US$ 16.500 millones es sólo el mínimo. Es probable que la producción real sea varias veces superior", dijo en otra publicación.
Según Ryu Young-ho, analista de NH Investment & Securities, la fábrica de Samsung en Taylor "no tenía prácticamente clientes hasta ahora, por lo que este pedido es bastante significativo".
En octubre, Reuters informó de que Samsung había pospuesto la entrega de equipos de fabricación de chips ASML para su fábrica de Texas porque aún no había conseguido ningún cliente importante para el proyecto. Ya ha retrasado el inicio operativo de la planta hasta 2026.
No está claro si el acuerdo Samsung-Tesla está relacionado con las actuales conversaciones comerciales entre Corea del Sur y Estados Unidos. Seúl busca alianzas con Estados Unidos en chips y construcción naval en medio de los recientes esfuerzos por alcanzar un acuerdo comercial que elimine o reduzca los posibles aranceles estadounidenses del 25%.