En los próximos días se develaría el futuro de Multitiendas Corona. Las opciones son su continuidad o su quiebra. Sus dueños, la familia Schupper, busca sacar adelante a la compañía, para lo cual se comprometieron a inyectar recursos frescos.
Este 5 de junio, la junta de acreedores votará la nueva propuesta de reorganización presentada por la cadena de tiendas, la que considera -junto con el otorgamiento de nuevas condiciones para el pago de la totalidad de los créditos- la inyección de $ 24 mil millones.
Los hermanos Paula, Malú y Herman Schupper Messcher se alinearon y plantearon su compromiso para financiar el 50% de una línea de crédito rotativa de capital de trabajo para salvar a la empresa. El remanente sería con financiamiento bancario.
Es decir, un 50% de la línea ($ 12 mil millones) sería proporcionada por los accionistas de Corona, quienes otorgarían un préstamo a la compañía a través de las sociedades por ellos controladas que estimen pertinentes.
Una condición suspensiva de apertura de la línea propuesta es que los socios de la multitienda obtengan, sea de los mismos acreedores garantizados -o de otras entidades-, uno o más créditos garantizados con hipotecas sobre inmuebles de propiedad de los vehículos societarios que los accionistas determinen.
El plan era que la junta de acreedores votara este 26 de mayo la propuesta, pero la empresa deudora solicitó más plazo para negociar con sus acreedores, el que fue otorgado por la justicia.
Según explicó en la junta el abogado de Corona, Nelson Contador, “no prosperó la compra de la compañía por parte de un inversionista asiático, atendido la política arancelaria que impuso EEUU”.
Dado esto, Contador dijo que solo tres días antes de la junta se presentó el nuevo texto de acuerdo. “A partir de esa fecha, se ha producido una serie de análisis por parte de los acreedores financieros, que van por buen camino, sin embargo, hay cuestiones formales que ajustar y, en base a ello, es necesario un espacio más de tiempo”, aseguró.