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Supermercadista colombiana Justo y Bueno negocia tomar el control de cadena chilena Erbi

“Efectivamente se está llevando a cabo una negociación. Los detalles de la transacción son confidenciales”, señalaron desde la firma colombiana al ser consultados.

Por: José Troncoso Ostornol | Publicado: Miércoles 8 de enero de 2020 a las 04:00 hrs.
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La cadena colombiana opera mil locales en su país y tiene otros 100 en Panamá.
La cadena colombiana opera mil locales en su país y tiene otros 100 en Panamá.

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La firma colombiana Justo y Bueno anunció su arribo a Chile. Para concretarlo, la compañía -que declaró que busca transformarse en la principal cadena de supermercados de bajo costo de América Latina- negocia la adquisición de la empresa local Erbi.

Esta compañía fue fundada por Claudio Engel y abrió la primera sucursal en Pudahuel el 29 de junio de 2007. Actualmente maneja 32 establecimientos en las regiones Metropolitana y de Valparaíso. Se define como “una cadena de supermercados de formato pequeño, cercano a los hogares, y dedicados a satisfacer las necesidades cotidianas de las personas”, esto es, compra semanal y diaria o de relleno.

En la propiedad de la compañía también participan, con un porcentaje minoritario, los hermanos Jorge y Octavio Bofill, además de Agustín Solari, exejecutivo de Falabella y hoy dedicado a emprendimientos personales y director de empresas.

Según personas al tanto, el objetivo de Justo y Bueno es adquirir una participación controladora de Erbi, en un monto que se mantiene bajo reserva. Las mismas fuentes consultadas afirman que el estallido social no habría amilanado a los ejecutivos de la colombiana. Por el contrario, verían una oportunidad para su modelo de negocio.

Diario Financiero consultó directamente a la empresa colombiana por las negociaciones para tomar el control de Erbi. La respuesta fue: “En Justo y Bueno estamos felices con nuestra entrada al mercado chileno. Efectivamente se está llevando a cabo una negociación. Los detalles de la transacción son confidenciales”, señalaron desde Colombia.

Erbi tiene números azules, destacan fuentes conocedoras, y tiene en carpeta un importante plan de expansión, dado los buenos resultados que ha exhibido en el último tiempo.

La compañía apunta a un público objetivo preferentemente C2, C3 y D, aunque también tiene presencia con algunas tiendas en zonas de La Dehesa, Vitacura y Chicureo.

Pero no todo fue fácil. En sus inicios, la cadena solo supo de pérdidas. La competencia con grandes operadores como Walmart (matriz de Lider, Ekono y Acuenta) y Cencosud (que opera los Jumbo y Santa Isabel) fue compleja. Incluso, se evalúo su cierre. No obstante se llevó a cabo una profunda reformulación del modelo de negocio, lo que incluyó el cierre de un porcentaje importante de establecimientos, los más deficitarios.

Junto a esto, los socios decidieron modificar los locales. Se siguió el modelo de Carrefour Express (ampliamente expandido en Europa), que es un supermercado de proximidad. Pero también se tomaron elementos explotados por la gigante alemana Lidl, que opera en el segmento de los supermercados hard discount -descuento duro, en español-, en que se incorpora una amplia gama de productos de marca propia, generalmente mucho más económicos.

El modelo de Erbi calza perfectamente con la estrategia que ha desplegado la colombiana Justo Bueno, y –en caso de concretar su compra- le permitiría tomar una participación en el mercado chileno de manera rápida.

Tras sólo tres años de operación, la empresa maneja más de mil locales en Colombia y está partiendo su expansión en Panamá, donde ya tiene 100 ubicaciones. Es propiedad del grupo Reve, al cual ingresó como socio el fondo de capital Australis Partners, de Estados Unidos, a mediados de 2018.

El creador de Justo y Bueno es el venezolano Michel Olmi, quien realizó estudios de doctorado en Matemáticas y Finanzas en Londres y luego trabajó con un banco en Alemania. En ese país le llamó la atención que algunas de las familias más ricas fundaran dos cadenas de descuento duro: Aldi y Lidl.

Olmi se contactó con un exejecutivo de Aldi que había asesorado a varias cadenas en países en desarrollo y, tras evaluar algunos mercados, decidió llevar el modelo a Colombia y luego buscar extenderlo por la región.

De los grandes formatos a tiendas de proximidad

Como los ríos vuelven a su cause natural se ve el resurgir de las tiendas de barrio. Pero no sólo los tradicionales boliches, sino que también grandes cadenas que han apostado por un formato de cercanía. Esto se ha dado en mercados desarrollados, pero en Chile aún es muy incipiente.
La situación podría cambiar con el arribo de la colombiana Justo y Bueno, que precisamente apunta a locales con no más de dos cajas, poco surtido y marcas propias a precios más económicos.
En el país, entre las grandes cadenas, sólo Walmart se ha atrevido al desarrollo del formato tipo hard discount con su cadena Ekono.
No obstante, todos los competidores han dejado a un lado la construcción de grandes hipermercados para potenciar el formato de salas medianas.
Por otro lado, se destaca que las cadenas de hard discount abren una oportunidad para los medianos y pequeños empresarios que vende productos de fabricación nacional. Estar en las góndolas -bajo la marca del propio supermercado- puede elevar de manera relevante su rentabilidad.

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