La matriz de United Airlines
casi
multiplicó por diez su ganancia del segundo trimestre y terminó la
primera mitad del año en positivo, con una ganancias semestral de US$ 191
millones, frente a los US$ 354 millones perdidos en el mismo
periodo de 2009, cuando la crisis afectó a todo el sector.
La
compañía UAL, que está en proceso de fusionarse con
Continental para crear la mayor aerolínea del mundo, detalló hoy que
su beneficio neto del primer semestre del año fue de 96 centavos por
acción, desde los US$ 2,44 por título perdidos un año antes.
Esta
recuperación, que fue más contenida de lo esperado por los
analistas, fue posible gracias al aumento del 22% en los ingresos
semestrales (hasta US$ 9.402 millones). El aumento de los
ingresos contrarrestó el incremento del 12,9%
en los gastos operativos (US$ 8.899 millones).
Sólo en el segundo
trimestre del año -que es el periodo que más
detalladamente estudian los analistas estadounidenses-, UAL ganó US$ 273
millones (US$ 1,29 por acción), lo que supone
prácticamente diez veces más que los US$ 28 millones (19 centavos)
ganados un año antes.
Este avance también fue posible en gran
parte gracias al
incremento del23,4% de los ingresos operativos, que alcanzaron los US$ 5.161 millones.
Ello permitió compensar el avance del
20,9% en los gastos
operativos, que llegaron a US$ 4.727 millones afectados,
entre otros factores, por un incremento del 80% en el coste
trimestral del combustible.
Durante el segundo trimestre los
ingresos de la aerolínea por
cada pasajero transportado, asiento ofrecido y milla recorrida
(PRASM, por sus siglas en inglés) aumentaron el 26,9% respecto al
mismo periodo de 2009.
Esta medida -que sirve de referencia en el
sector aéreo para
medir la evolución del negocio- avanzó 19,1% en los vuelos
nacionales, un 52% en los que cubren el Pacífico, un 33,1% en los
que cruzan el Atlántico y un 55,9% en los que conectan con América
Latina.
Respecto al proceso de fusión con Continental -en una
operación
que quitaría a Delta el puesto de mayor aerolínea del mundo-, la
compañía detalló que los sindicatos de pilotos de ambas empresas han
alcanzado un principio de acuerdo para trabajar juntos.
Los
analistas ya esperaban una clara mejoría de las cuentas de
United, así como del resto de las aerolíneas estadounidenses, puesto
que todas se están beneficiando del aumento de la demanda tras una
recesión que les afectó con fuerza el año pasado.