El Congreso argentino aprobó durante la madrugada de ayer el proyecto que pretende cambiar la sede del pago de la deuda soberana para que los próximos desembolsos no sean bloqueados por los tribunales de Estados Unidos.
Después de casi 16 horas de debate, los diputados aprobaron la iniciativa con 134 votos a favor y 99 en contra. El Senado visó el proyecto la semana pasada.
La norma permitirá a la nación pagar su deuda emitida bajo leyes extranjeras, cercana a los US$ 29 mil millones, en Buenos Aires o en ciudades fuera del alcance de la justicia estadounidense.
Sin embargo, los analistas advirtieron que la ley podría enfrentar problemas para ser implementada.
“La propuesta enfrenta varias dificultades”, comentó a Reuters Alejo Costa, estratega jefe del banco local Puente. “No esperamos una tasa de participación significativa, aunque el gobierno enviará finalmente la señal que busca. Según su visión, ellos están haciendo lo que pueden para hacer el pago”, añadió.