La economía de la eurozona inició 2017 con buen pie.
Los productores del bloque ayudaron a mantener al sector privado en buen estado en el arranque del año, con el crecimiento industrial en su mejor nivel desde la crisis de la deuda del continente.
Según arrojó ayer la encuesta de gerentes de compras (PMI) de Markit IHS, el crecimiento se ubicó en 54,3 puntos en enero, sólo un poco por debajo de los 54,5 alcanzados a fines de 2016, pero aún por encima de los 50 puntos que lo separan de la contracción.
Los productores se anotan así su mejor mes desde abril de 2011, impulsado por un euro más débil, el aumento de nuevas órdenes y niveles saludables de optimismo sobre negocios futuros.
Las cifras sugieren que el bloque de 19 países se expandirá 0,4% en el primer trimestre de 2017, en línea con el ritmo que logró hacia fines del año anterior, dijo Markit.
Algunos indicadores muestran señales alentadoras, como el empleo, que alcanzó su mayor nivel desde febrero de 2008, debido a la expansión de las empresas a tasas similares previas a la crisis financiera global, destacó el economista jefe de negocios de IHS Markit, Chris Williamson.
La economía de la eurozona ha tenido un mejor desempeño tras el referendo del Reino Unido por el Brexit, con encuestas de confianza de los consumidores sugiriendo que los ciudadanos del bloque han ignorado en gran medida los efectos de la votación.
Este 2017 será un año clave para las economías más grandes de la zona con Holanda, Austria, Francia y Alemania celebrando elecciones. Italia también podría ir a las urnas para elegir a un nuevo primer ministro.
