La primera ministra del Reino Unido, Theresa May, accedió ayer frente a la Cámara de los Comunes a publicar la estrategia formal de su gobierno para las negociaciones del Brexit, un día después de que la Corte Suprema sentenciara que el parlamento británico tendrá voz en la activación del artículo 50.
“La semana pasada establecí este valiente plan para un Reino Unido global y reconozco que hay un apetito en esta Cámara por ver ese plan fijado en un libro blanco”, dijo May. “Puedo confirmar a la Cámara que nuestro plan será fijado en un libro blanco”, agregó.
A su vez, el portavoz de la primera ministra informó que hoy se presentará al parlamento un proyecto “lo más sencillo posible” para la impulsión del artículo 50.
Posibles implicancias
El libro blanco, que será discutido y votado por separado con el proyecto para activar el artículo 50, fue exigido por el Partido Laborista, el principal grupo de la oposición, en conjunto con varios miembros del propio Partido Conservador de May, que se reunieron el martes tras el fallo de la corte.
Según explicó a DF Stefan Enchelmaier, profesor de Ley Europea y Comparativa de la Universidad de Oxford, de acuerdo a la legislación del país, la activación del artículo 50 exigirá una “ley corta de 30 palabras” que autoriza la notificación de salida del país de la Unión Europea.
A su vez, los expertos del Instituto por el Gobierno señalaron ayer que ésta podría ser aprobada a principios de marzo, en línea con el calendario del Ejecutivo.
Mientras tanto, el libro blanco es un documento con “directivas amplias” de lo que el gobierno quiere lograr, señaló Enchelmaier. Sin embargo, probablemente será un texto “poco ambicioso”, una versión más extensa del plan presentado la semana pasada por la primera ministra, que incluye doce puntos clave en la negociación, como la salida del mercado único europeo y el voto parlamentario sobre el acuerdo final.
Y aunque los legisladores tendrán que discutir las enmiendas prometidas por varios partidos –que pretenden lograr más control parlamentario sobre el proceso de negociaciones– , el documento “no es obligatorio” para el Ejecutivo, agregó el experto. Además, hay una acuerdo informal de que la Casa de los Lores –donde los conservadores de May no tienen mayoría– no sabotee los proyectos importantes, aseguró.
Efecto positivo
Tras la promesa de May, la libra subió ayer 0,93%, ubicándose en US$ 1,2623.
Otra noticia alentadora para los mercados vino desde las oficinas de Santander, que en medio de los anuncios de salida de bancos de la City señaló que no planifica trasladar sus ejecutivos de Londres y está “completa y totalmente“ comprometido con la ciudad.
Sin embargo, otros países están en campaña para atraer a las instituciones financieras tras el Brexit. Así, la autoridad supervisora financiera alemana se reunirá el próximo lunes con 20 bancos extranjeros –entre ellos, Morgan Stanley, Goldman Sachs y Citigroup– para entregar detalles de regulaciones para el posible traslado de sus sedes a Frankfurt.