Los aeropuertos londinenses de Heathrow,
Gatwick y Stansted, gestionados por BAA, propiedad del grupo español
Ferrovial, siguen abiertos pero con retrasos y cancelaciones de
vuelos por la intensa nevada que ha caído en la capital británica.
Según informó hoy BAA en un comunicado, el aeropuerto de
Heathrow, el más importante del Reino Unido, tiene ahora operativas
sus dos pistas, aunque ha trabajado la mayor parte del día con tan
sólo una de ellas, lo que ha provocado importantes retrasos y la
cancelación de 860 vuelos.
El operador aeroportuario señaló que un equipo de limpieza
formado por 58 máquinas quitanieves ha trabajado continuamente desde
el domingo para eliminar la nieve de ese aeródromo.
Sin embargo, el gestor aeroportuario precisó que la intensidad de
la nevada "ha sido de tal magnitud que incluso había falta de
espacio para acumular la nieve retirada".
En Gatwick, segundo aeropuerto del país, la única pista existente
está en funcionamiento, aunque el temporal ha provocado la
cancelación de 47 vuelos.
Los servicios de tren y autobús que conectan este aeropuerto con
el centro de Londres también se han visto afectados por la nieve,
por lo que BAA recomienda que los pasajeros acudan "con tiempo" a
las terminales de transporte.
La compañía británica agregó que la única pista de Stansted
continúa operativa, si bien ha sufrido 170 cancelaciones.
Sin embargo, los otros dos aeropuertos londinenses, el de la City
y el de Luton, sí cerraron por la fuerza del temporal de nieve.
La mayor nevada de los últimos 18 años en este país paralizó hoy
Londres y el sureste de Inglaterra, con las carreteras colapsadas,
los aeropuertos al mínimo, las escuelas cerradas y los hospitales
reduciendo las operaciones quirúrgicas.