Por Toh Han Shih
Se espera que China presente su propia versión de la nueva ley de impuestos de EEUU que requiere que las instituciones financieras de todo el mundo entreguen a Washington información sobre los contribuyentes estadounidenses, según analistas.
Esta ley hará más difícil para los funcionarios chinos corruptos y sus familiares guardar su riqueza en Hong Kong.
El Secretario de Servicios Financieros y profesor del Tesoro Chan Ka-Keung ha firmado un acuerdo con EEUU para permitir que Hong Kong pase información de impuestos de estadounidenses que trabajan en Hong Kong a sus contrapartes de EEUU bajo la Ley de cumplimiento tributario de cuentas extranjeras (Fatca, su sigla en inglés).
China, como país miembro del G-20, probablemente haría lo mismo, dijo Richard Weisman, de la firma de abogados Baker & McKenzie. Agregó que China probablemente usaría una versión del Fatca para recopilar información tributaria sobre los ciudadanos chinos de todo el mundo, incluyendo Hong Kong.
“Fatca es sólo el comienzo de lo que será una obligación de cumplimiento nuevo e importante para las instituciones financieras. El siguiente desarrollo relevante será la propuesta del G20 de multilateralizar Fatca. China, como miembro del G20, ha respaldado esta iniciativa. China puede obtener información uniéndose al enfoque del G20 del Fatca. Ese es un escenario probable”, comentó Weisman.
El 18 de marzo, el comisionado subrogante de impuestos, Zhang Zhiyong, dijo que China debe fortalecer su recaudación tributaria internacional, participar del intercambio internacional de información sobre la evasión fiscal, y poner freno a la evasión fiscal transfronteriza.
En la cumbre del G-20 en San Petersburgo en septiembre, se acordó que los Estados miembros comenzarían a intercambiar información tributaria de forma automática a finales de 2015.
Si China implementa su propia versión de Fatca y se aplica a Hong Kong, puede afectar el deseo nacional chino de depositar fondos en los bancos en la ciudad. Pero Hong Kong no sería la excepción a cualquier otra jurisdicción no continental porque todos serían afectados por igual, sostuvo Patrick Yip de Deloitte Touche Tohmatsu.
Yip precisó que muchas instituciones financieras de Hong Kong estaban encontrando el cumplimiento de Fatca costoso y difícil. “Fatca está enviando un mensaje claro a los estadounidenses acerca de la seriedad con que el gobierno de EEUU está persiguiendo a los evasores de impuestos”, agregó.