El Parlamento de Japón eligió a Sanae Takaichi como la primera primera ministra del país, mientras las acciones en Tokio alcanzaban un récord histórico impulsadas por el optimismo de los inversionistas sobre las políticas de su nuevo gobierno.
Takaichi obtuvo 237 votos de los parlamentarios en la cámara baja de 465 escaños, tras un acuerdo de coalición alcanzado por su Partido Liberal Democrático (LDP) 24 horas antes.
Su primer acto como primera ministra fue nombrar un gabinete con la primera ministra de Finanzas mujer del país y, en un gesto para unificar al partido, incluir a tres de los cuatro rivales que compitieron con ella en la reciente elección interna del LDP.
Se espera que la nueva coalición gobernante considere aumentos en el gasto en defensa, rebajas de impuestos y una reapertura de las plantas nucleares suspendidas de Japón.
El índice Nikkei 225 cerró el martes con un alza de 0,3%, tras llegar a subir 1,5% durante la jornada y superar los 49.900 puntos, muy cerca de la marca histórica de 50 mil. En lo que va del año, el índice ha subido más de 25%.
En una conferencia de prensa ese mismo día, la nueva primera ministra advirtió que asumía el cargo con la nación en “estado de crisis”, con los hogares afectados por la inflación y “sin tiempo que perder”.
Takaichi descartó convocar elecciones anticipadas, asegurando que ordenará la elaboración de un paquete de estímulo económico para abordar el aumento del costo de vida.
“Nuestra primera prioridad es la economía. No tengo tiempo para discutir la disolución del parlamento”, dijo.
Takaichi, ex presentadora de televisión y admiradora de Margaret Thatcher, nombró a Satsuki Katayama, exministra de Revitalización Económica, como nueva ministra de Finanzas.
Otros nombramientos incluyen a Yoshimasa Hayashi (Asuntos Internos y Comunicaciones), Toshimitsu Motegi (Relaciones Exteriores) y Shinjiro Koizumi (Defensa). Los tres compitieron con Takaichi por el liderazgo del LDP y representan el ala más liberal del partido.
El primer gran desafío internacional de Takaichi y Katayama llegará la próxima semana, cuando el presidente estadounidense Donald Trump y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, visiten Tokio antes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Corea del Sur.
“Takaichi trade”
El yen continuó debilitándose frente al dólar estadounidense, cayendo por debajo de 151 yenes, ante las apuestas de que el Banco de Japón podría posponer un alza de tasas en su próxima reunión.
El entusiasmo bursátil siguió al acuerdo de coalición entre el LDP, que ha gobernado Japón durante casi 70 años, y el Partido de la Innovación de Japón (JIP), una fuerza reformista con fuerte presencia parlamentaria en Osaka.
El gobernador de Osaka y copresidente del JIP, Hirofumi Yoshimura, declaró tras la votación parlamentaria que:
“El ferviente deseo de la primera ministra Takaichi de mejorar genuinamente Japón quedó muy claro... No actuamos a medias; esta convicción compartida nos ha unido.”
La formación de esta coalición LDP-JIP siguió al colapso del acuerdo de 26 años con Komeito, partido que si bien compartía muchos objetivos, a menudo frenaba las grandes iniciativas del LDP.
La politóloga Mieko Nakabayashi, de la Universidad de Waseda, advirtió que ambos partidos corren riesgo de fracturarse pese a la apariencia de estabilidad:
“El gabinete ha sido diseñado para unir al partido y reducir el riesgo de división. Estos nombramientos son una estrategia de supervivencia para el LDP.”
El estratega jefe de renta variable de Nomura Securities, Tomochika Kitaoka, destacó que, aunque las acciones japonesas participan del rally global, la llamada “Takaichi trade” ha sido un fuerte motor interno.
Dijo que el JIP está alineado con el LDP en la necesidad de aumentar el gasto en defensa y reactivar los reactores nucleares inactivos desde el desastre de Fukushima en 2011.
Los analistas señalaron que la “Takaichi trade” se ha transformado en las últimas semanas, impulsada por las expectativas de una administración estable, reformas estructurales y estímulos económicos.
“El JIP es visto como procrecimiento, igual que Takaichi”, explicó Kitaoka. “Habrá un equilibrio de poder difícil de manejar, pero en materia de defensa y energía, la nueva primera ministra tendrá más margen para actuar que con Komeito.”
El estratega Neil Newman, de Astris Advisory, comentó que, dado el alto interés de los inversionistas extranjeros, elevó su proyección del Nikkei 225 a 51.500 puntos para fin de año.
En la conferencia, Takaichi dijo que espera una serie de reuniones internacionales, incluyendo un encuentro con Donald Trump la próxima semana, y expresó su ambición de posicionar a Japón como potencia diplomática global.
“Quiero una diplomacia para Japón que florezca en el centro del mundo”, concluyó.