Japón pide un trato justo a la OMC

Japón instó a los miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Ginebra, a no imponer restricciones “injustificadas” a las importaciones como consecuencia de las fugas radiactivas en la planta nuclear japonesa Fukushima. La delegación nipona dijo que las autoridades han restringido la distribución de productos agrícolas potencialmente afectados por la contaminación radiactiva, y consideró que otros países no deberían reaccionar de forma exagerada.

Los últimos reportes daban cuenta de que Japón estudiaba ampliar el perímetro a 40 Km., tras detectarse altos niveles de radiación en Fukushima, y la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) recomendó la evacuación de 7.000 habitantes y extender 20 Km. más la zona de seguridad. 
El temor sobre la propagación de la contaminación ha crecido, por los últimos informes que dicen que se habrían filtrado grandes cantidades de agua contaminada en las salas de máquinas y en las galerías técnicas subterráneas, llegando al Océano Pacífico, donde la tasa de yodo radiactivo supera en más de 3.300 veces lo permitido en el agua marina. Si bien los expertos dicen que las partículas radiactivas probablemente no afecten en forma relevante a los peces, las preocupaciones sobre los mariscos de las costas del país con que se produce el sushi en el mundo son otro problema para Japón, que ya fue afectado por la contaminación en la leche, verduras y agua, además de la escasez de piezas de automóviles y tecnología.

El primer ministro nipón, Naoto Kan, aseguró que su gobierno se encuentra en “estado de alerta máxima”, a medida que los esfuerzos por reducir el riesgo de radiación logran escasos avances. Ayer se anunció un plan para desmantelar la planta nuclear de Fukushima, que según analistas e ingenieros tendría un costo cercano a US$ 12.000 millones para la operadora Tepco.

También se ordenó, de forma urgente, la intervención de las 55 plantas en el país para reforzar las medidas de seguridad.