Por Will Clem
Casi la mitad del total de las demandas para la entrega de información retenida por el gobierno ha sido rechazada por los tribunales de China en los tres años desde que entró en vigor la ley que pretendía abrir el acceso a la información, comentó un juez que ayudó a elaborar el proyecto de ley.
Li Guangyu, juez de la Corte Suprema Popular y segundo en el directorio ejecutivo del tribunal, fue citado por medios chinos diciendo que las regulaciones sobre la Información Abierta de Gobierno estaban siendo “revisadas para dar claridad en asuntos que estaban creando una barrera a la entrega de materiales del gobierno”.
Gran parte de los obstáculos para un mayor acceso público a la información gubernamental giran en torno a conflictos con legislaciones que tienen un mayor peso, como la ley de Secreto de Estado, y se suman a una arraigada tradición de secretismo gubernamental y a falta de recursos para cumplir con las solicitudes.
La ley señala que la información puede ser mantenida en secreto si los órganos del gobierno demuestran que su liberación podría tener un impacto negativo en la seguridad nacional, seguridad pública o estabilidad pública, entre otros aspectos, pero Li señala que falta una definición clara.
Según el juez, el comité había intentado producir una clasificación concreta, pero los resultados demostraron “que esto es un problema global”.
El juez indicó que el gobierno y los tribunales necesitaban adoptar un “enfoque cauteloso” para usar la cláusula de “estabilidad” y que no se debe utilizar como “excusa”.
China Youth Daily reportó que la “insuficiente transparencia pública” sobre la información relacionada a “incidentes repentinos mayores que se han convertido en temas de interés” y han sido una fuente de crítica y sospecha en los últimos años.
Ocultar investigaciones
Los órganos del gobierno a veces hacen el mayor esfuerzo por ocultar información sobre ciertos accidentes y disturbios, como el número de estudiantes que murieron en los colegios que colapsaron durante el terremoto de Sichuan en 2008 y los detalles relacionados a las construcciones de los edificios.
Y aún es incierto cuándo la investigación sobre el choque del tren de alta velocidad, que cobró la vida de 40 personas en julio, hará público sus hallazgos, a pesar de las promesas iniciales de que los resultados de la investigación serían entregados a mediados de septiembre.