Los precios de los bienes importados
en Estados Unidos bajaron en febrero un 0,2%, la mayor
disminución en los 26 años de historia del indicador, informó hoy el
Departamento de Trabajo.
En un año, los precios de los bienes importados suman un descenso
de 12,8%, en una nueva muestra del entorno deflacionario
en el que se encuentra la economía de Estados Unidos. En enero los
precios habían bajado un 1,2%.
La disminución registrada en febrero fue la menor desde julio,
debido al encarecimiento de los precios del petróleo en un 3,9%.
Los precios de las exportaciones no petroleras bajaron un 0,4%; los precios de los bienes de capital cayeron un 0,4%, y los precios de los suministros industriales, excepto el
petróleo, cayeron un 2%.
Hace uno o dos años el aumento de los precios de los bienes
importados impulsaba las presiones de inflación, y la fuerte demanda
global elevaba los precios de los materiales y suministros
industriales, incluidos el petróleo, los compuestos químicos y los
plásticos.
Todo esto ha cambiado desde que la economía global entró en la
peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.
El debilitamiento de la demanda ha desinflado los precios y la
cotización del dólar estadounidense se ha fortalecido porque muchos
inversionistas en todo el mundo creen que los activos en EE.UU. pueden ser
más sólidos que en otras partes.