El Tribunal de Justicia de la Unión Europea falló ayer a favor de los clientes en el caso de las indemnizaciones de las llamadas cláusulas suelo.
Las entidades tendrán que devolver todo lo que las personas han abonado de más durante la vida del préstamo hipotecario y no solo a partir del 9 de mayo de 2013, como había fijado el Tribunal Supremo.
“La jurisprudencia española que limita en el tiempo los efectos de la declaración de nulidad de las cláusulas suelo contenidas en los contratos de préstamo hipotecario en España es incompatible con el Derecho de la Unión. Tal limitación da lugar a una protección de los consumidores incompleta e insuficiente, por lo que no constituye un medio adecuado y eficaz para que cese el uso de las cláusulas abusivas”, aseguró el TJUE en un comunicado.
“La declaración judicial del carácter abusivo de una cláusula debe tener como consecuencia el restablecimiento de la situación en la que se encontraría el consumidor de no haber existido dicha cláusula”, precisó la institución.
Las cláusulas suelo se incluyeron en la mayoría de los contratos de préstamo hipotecario variable para poner un tipo de interés mínimo que el cliente debía abonar, independientemente de lo que bajase eventualmente el euribor.
El supremo español declaró abusivas la mayoría de estas cláusulas pero limitó la compensación: dejaría de aplicarse a partir de mayo de 2013, pero no se restituiría lo pagado de más anteriormente.
Las cifras concretas del impacto no están claras, pero algunos bancos llegaron a caer ayer un 10% en bolsa tras conocerse la sentencia.
Según Goldman Sachs, BBVA será el banco más afectado, con 1.815 millones de euros (US$ 1.892 millones). CaixaBank cifró en 750 millones de euros el costo de una sentencia contraria a sus intereses. Los siguientes son Banco Popular, que habría provisionado 350 millones de euros, y Bankia, con 160 millones.
pib sube 0,7% en cuarto trimestre
El Banco de España aseguró en su último boletín económico que la economía ha mantenido en los últimos meses "un ritmo de avance elevado" y podría haber crecido un 0,7% en el cuarto trimestre, al igual que en el tercero.
En particular, el informe apunta a que "la prolongación del intenso proceso de generación de empleo y la persistencia de condiciones financieras favorables habrían seguido sosteniendo el gasto de los hogares en bienes y servicios de consumo, a un ritmo similar al del pasado reciente".
Los precios de consumo, por su parte, registraron un repunte significativo, pasando a mostrar tasas positivas a partir de septiembre.