Los nuevos máximos que acaba de marcar el precio del
petróleo, al borde de los 146 dólares, roban parte de las dosis de confianza
que habían generado los resultados y previsiones de General Electric. Los
futuros de Wall Street giran a la baja, sin despejarse las incógnitas sobre el
sector financiero, y a la espera de una batería de datos macro.
Los futuros de la Bolsa de Nueva York profundizan sus
recortes, y rozan ya el 1% en el Dow Jones. Un signo mucho más comedido
presentaban en las horas previas a la consecución de los nuevos máximos
históricos en el precio del petróleo. El barril tipo West Texas ha superado los
145,85 dólares alcanzados la semana pasada.
Los nuevos récords del crudo se producen en pleno arranque
de la temporada de presentación de resultados del segundo trimestre, y no hacen
sino añadir aún más incertidumbre sobre el signo de estas cuentas y, más aún,
sobre las previsiones para los próximos trimestres.
General Electric al menos se ha encargado de suavizar estos
temores. La compañía, referente empresarial en Wall Street, ha cumplido con lo
esperado al presentar un 6% de descenso en su beneficio, ha superado las
expectativas con sus ingresos, y ha mantenido sin cambio sus previsiones para
todo 2008, a
pesar del deterioro económico y de los mercados. El balance final es una
revalorización en las acciones del grupo del 15,% en la preapertura.
Donde se mantienen abiertas todas las incógnitas es en el
sector financiero. Los comentarios de insolvencia en las hipotecarias Fannie
Mae y Freddie Mac han aflorado la posibilidad de que las autoridades
estadounidenses acudan al rescate de las dos entidades. El pesimismo se adueña
otra vez de las cotizaciones de las dos hipotecarias, con pérdidas en la
preapertura del 25% para Fannie Mae y del 35% para Freddie Mac.
Las esperanzas para salir de los descensos que presentan los
futuros de Wall Street podrían pasar por un freno en la escalada del petróleo y
por una oelada de datos macro favorables. La agenda de hoy incluye la
publicación de indicadores como el de la balanza comercial, los precios de
importación y exportación, y el índice de confianza de los consumidores.