Luego de que la divisa japonesa aumentara frente al dólar desde el mínimo en dos años y medio, los inversionistas se encuentran a la espera de la resolución política del Banco Central de Japón; en donde se hablará de las proyecciones del yen. Analistas del mercado dijeron a Reuters que si el banco japonés cumple con las expectativas de duplicar su meta de inflación, esta decisión podría provocar que el dólar perdiera aún más de terreno, considerando las enormes alzas que logró desde octubre y que los inversionistas como los fondos de cobertura serían proclives a tomar ganancias.
Los operadores ya se pusieron en el caso de que el Banco de Japón los decepcione y disminuyeron las apuestas contra la moneda nipona. Los mercados financieros están esperando que el Gobierno en conjunto con el banco den una declaración que incluya una meta de inflación de 2% y un incremento en el programa de compras de activos con compromiso de final abierto. El dólar, que se depreció un 0,6% frente al yen, al cierre de la jornada de ayer llegó a ubicarse en 89,74 unidades de Japón. En la sesión anterior la moneda norteamericana había llegado a su mayor nivel desde junio de 2010, alcanzando los 90,25 yenes.
Por el momento, los operadores de divisas están aumentando sus apuestas contra el dólar tomando posición por el euro, luego de que el presidente del Banco Central Europeo Mario Draghi dijera que la zona euro comenzaba a mejorar, mientras que el euro se ubicó en los US$ 1,3310 frente a los US$ 1,3400 que mantuvo durante la semana anterior.