Uno de los componentes que usó el gobierno de Michelle Bachelet para intentar darle legitimidad al sistema de pensiones en su reforma fue el “ni un peso más a las AFP”, lo que se vio reflejado en la iniciativa en la creación de un ente estatal que administraría la cotización adicional.
El actual Ejecutivo tampoco quiere dejar este factor de lado, teniendo en cuenta la presión social que hay sobre el actual modelo previsional.
La fórmula que se plantea es a través de abrir la competencia a las AFP. A pocos días de ser electo como Presidente, Sebastián Piñera ya había dado luces en torno a la idea, como que las cajas de compensación puedan gestionar fondos de pensiones, lo que ayer fue reforzado por el ministro de Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg.
“Lo que queremos es introducirle más competencia a este sistema, no tenemos ni siquiera cercana una posición de darle el monopolio de la administración de los fondos a las AFP”, dijo a Tele13 Radio.
Fuentes apuntan que en el gobierno no descartan la creación de una AFP estatal, proyecto que hoy está en el Congreso, una entidad paralela -similar a lo que fue el Consejo de Ahorro Colectivo propuesto por Bachelet- o incluso otras entidades financieras.
La idea gusta en las cajas de compensación, que han mostrado en varias oportunidades su disposición para entrar al mercado de administración de fondos de pensiones.
“Si nos piden que nosotros desarrollemos una AFP íntegralmente, estaremos dispuesto a hacerlo, con todo lo que eso significa: tener equipos de inversión, de adquisición de afiliados, los pagos de pensiones”, indica el gerente general de Caja 18, Álvaro Cámbara.
Sin embargo, la idea no convence a todos. El exsuperintendente de Pensiones, Alejandro Ferreiro, señala que si se abre la competencia a otras entidades que no sean las AFP, se corre el riesgo de que el giro único de éstas cambie, lo que podría poner en cierto riesgo los fondos de pensiones.
“El mezclar los giros vinculando por ejemplo entidades que prestan dineros al público, como un banco o una caja de compensación, con quienes más bien apuntan al ahorro forzoso, puede generar un conflicto de interés, una contradicción difícil de resolver”, comenta.