UBS estableció el nuevo gobierno
corporativo y convocó una junta extraordinaria de accionistas para elegir a
cuatro miembros del consejo de administración.
La directiva de UBS puso en marcha
la renovación del consejo de administración del banco como parte del plan de la
entidad por recuperar su posición en la elite de los bancos mundiales,
anunciado en el pasado mes de abril.
El plan prevé una clara separación
de los roles y responsabilidades de el consejo de dirección y la gestión
ejecutiva del banco.
Cuatro miembros del consejo han
dimitido- Stephan Haeringer, Rolf Meyer, Peter Spuhler y Lawerence Weinbach- y
los respectivos sustitutos serán nombrados en la próxima junta extraordinaria
de accionistas, convocada para el próximo dos de octubre. Aún se desconocen los
nombres de los posibles sustitutos, que serán revelados en los días previos a
la cita.
Sergio Marchionne saldrá reforzado
de la nueva apuesta del banco y será nombrado director independiente senior,
cargo que compatibilizará con el actual de vicepresidente no ejecutivo.
El nuevo plan
Separar los roles entre los
distintos órganos del banco es el objetivo prioritario tras la confusión causada
por la crisis subprime. El consejo de administración supervisará el negocio y
pedirá responsabilidades, mientras que el consejo ejecutivo y el director
ejecutivo serán los únicos responsables de la gestión de la entidad suiza.