
La columna de J.J.Jinks: Chapeau
Al mismo tiempo que la muerte de Ruth Bader Ginsburg llenaba las portadas de los principales medios, en el frío e impersonal mundo de los negocios el también juez estadounidense James L. Garrity Jr. daba su venia para aprobar el financiamiento DIP por US$2.450 millones para Latam Airlines. Este era el segundo intento luego de que el juez rechazara la primera propuesta con muy buenos modales, pero dando a entender claramente su desacuerdo con el planteamiento hecho por los Cueto y Qatar Airways sobre la posibilidad de convertir en acciones los recursos comprometidos por ellos en condiciones que el resto de los accionistas no podían alcanzar.