1La cifra más baja
desde diciembre de 2009
La variación negativa del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio sorprendió al mercado que apostaba por una variación neutra del indicador. De ahí que el -0,3% -la cifra más baja desde diciembre de 2009- permite al mercado ajustar a la baja las expectativas de inflación para este año, donde ya se habla que la variable se situará en la parte baja del rango meta del Banco Central.
2Alimentos y energía
a la baja
Las claves de esta importante caída, a juicio de la investigadora de Libertad y Desarrollo (LyD) Natalie Kramm, se centran en la disminución que registraron los precios de los alimentos y la energía. A esto se suma, que las bajas en las prendas de vestir, por las liquidaciones existentes por cambio de temporada, han ayudado a aminorar los efectos de la inflación. “En términos agregados, se observa un menor dinamismo de la demanda interna y, por consiguiente, una menor presión inflacionaria”, explicó Kramm.
Y agregó: “esto se refleja en el IPC sin alimentos y energía, que tuvo una variación mensual en junio de 0,1%”.
3Presiones
inflacionarias acotadas
A juicio de Kramm, con este resultado las presiones inflacionarias pasaron a un segundo plano en el corto plazo, dejando “más tranquilos a los consumidores”. Esto se explica, principalmente por el dinamismo que muestra el consumo, que si bien se mantiene con un ritmo considerable, ha empezado a mostrar signos de desaceleración.
4Expectativas de
inflación a la baja
El IPC de junio permite ajustar a la baja expectativas de inflación de los agentes para el año 2012, así lo cree la investigadora de
Libertad y Desarrollo quien prevé que el indicador alcanzará un 2,8% con un sesgo a la baja, explicado principalmente por la evolución que mostrará la actividad durante
el último trimestre del año en curso.
5Tasa de política
monetaria estable
Este escenario advierte que el ente rector no realizará cambios en la tasa de política monetaria, dado el dinamismo que exhibe la actividad. De hecho esta tendencia se repite desde hace algunos meses, especialmente ante la incertidumbre que genera la situación externa.