Por Miguel Bermeo T.
Sólo un aviso fue la compra del casino New York en Lima, Perú, que hizo el grupo local de casinos Dreams, controlado por la familia Fischer y un fondo del Citi. Para este año que comienza, las fichas están puestas en la capital peruana, donde la firma tiene un millonario plan de inversiones.
“El mercado peruano está creciendo mucho y si vamos a ingresar a Perú, obviamente, vamos a ser un operador relevante”, cuenta Jaime Wilhelm, gerente general del grupo de casinos. Para ello, Dreams dice que invertirán US$ 70 millones en nuevas operaciones en Lima –incluyendo los US$ 24 millones que pactaron por New York-, esto a través de casinos que partirían desde cero –exportando el modelo Dreams de casinos con hotel, centro de eventos, etc.- o comprando nuevas operaciones o asociándose.
Wilhelm dice que la apuesta responde a que “el mercado chileno está limitado. Nosotros venimos creciendo a grandes tasas, entre 2010 y 2012, creció 50% el Ebitda, a septiembre de este año vamos 23% arriba y el mercado chileno tiene un techo, con sus 24 licencias, y por lo tanto, no es posible mantener esas tasas de crecimiento sólo con el mercado local”.
Por ello, explica, “de Perú nos gustó mucho que podemos optar a tasas de crecimiento altas y a un mercado profundo en términos de juego y con potencialidades de crecimiento. Por otro lado, tiene una legislación súper clara y el juego está muy bien regulado”.
Respecto de ir a otros países, no hay nada concreto, debido a las limitantes legales o de otro tipo, como en Argentina. Por ello, el foco estará en Perú y seguirá puesto en Chile.
De hecho, Wilhelm cuenta que participarán en el proceso de licitación de la licencia que dejó el casino de Ovalle, que parte hoy.
Además, postularán a las relicitaciones de los casinos municipales en 2015, tal cual dice la ley hoy, con el fin de aumentar la participación que tiene –que lo dejan como el segundo mayor grupo-. La idea es conservar las plazas que hoy tienen y mirar a otras que consideran atractivas, como Viña del Mar y Coquimbo, hoy manos del mayor operador, Enjoy, de la familia Martínez.
Las concesiones municipales
Respecto de la industria de casinos chilena, con dos sistemas imperando en la actualidad: las concesiones municipales y los que surgieron bajo la nueva ley de casinos, el ejecutivo señala que para Dreams “lo deseable es una única ley de casinos”. Además, “no yendo contra eso”, lo que hay que respetar, dice Wilhelm, es la regulación vigente. “Hay que resguardar la ley por la cual todos los operadores tomamos las decisiones de inversión en las distintas regiones”, sostiene.
Sobre la idea de algunos municipios de extender las licencias, el gerente general de Dreams, señala que para ellos “lo principal es que haya claridad de sobre cómo serán las postulaciones, “porque hoy hay una ley, pero también rumores de proyectos de ley trabajándose para hacer cambios. Los alcaldes, por otro lado, quieren que los casinos permanezcan” y explica que “los operadores queremos que se establezcan cuanto antes las reglas del juego sobre las cuales se van a relicitar esas licencias y con el cuidado de no pasar a llevar aquello que se tomó en cuenta cuando se tomaron las decisiones de inversión”, puntualiza Jaime Wilhelm.
Dreams maneja dos licencias municipales: los casinos de Iquique y Puerto Varas. Ellos, dice el ejecutivo, representan hoy un 45% de los ingresos; sin embargo, la meta es que al 2015 es que bajen a menos de un 15%, gracias a las operaciones de Perú y la maduración de los otros casinos locales.
En términos de números, Dreams registró ingresos por $ 68.223 millones a septiembre pasado –un alza de 16% respecto de igual periodo de 2011-, de los cuales 79% los aportaron los casinos, un 13% alimentos y bebidas y un 8% el área hotelera.