El Panel de Expertos -instancia que dirime conflictos del sector eléctrico- puso en aprietos a la Comisión Nacional de Energía (CNE). Hace exactamente una semana, emitió sus dictámenes respecto a las diversas discrepancias que fueron presentadas respecto del Informe Técnico Final del Plan de Expansión Anual de Transmisión 2024 de la Comisión Nacional de Energía (CNE), donde no pasó desapercibido en la industria lo resuelto en torno al proyecto de línea de transmisión HVDC Lo Aguirre-Entre Ríos.
La obra, cuyo monto de inversión estimado es de US$ 1.500 millones, es una iniciativa similar a la megalínea Kimal-Lo Aguirre, pero hacia el sur. Entre las discrepancias presentadas el 30 de abril en el Panel, llamó la atención el escrito que puso sobre la mesa Colbún, un actor inesperado en esta discusión, donde estimó aconsejable eliminar el proyecto del Plan de Expansión 2024 y permitir a la CNE profundizar en el estudio de esta medida.
Por unanimidad, el Panel acordó eliminar del plan el proyecto, según las solicitudes de Colbún, pero también de la Asociación Gremial de Clientes Eléctricos No Regulados (Acenor).
"Los análisis realizados por el Panel muestran que, desde el punto de vista técnico, se debieran evaluar proyectos alternativos que garanticen que se está incorporando la obra más conveniente para el sistema. Ello es particularmente atendible en virtud del tamaño del proyecto y de los efectos sistémicos que tendrá sobre el resto de las instalaciones", dijo la instancia.
Por otra parte, agregó, "los análisis económicos muestran que los resultados de las metodologías para decidir si se incluye el proyecto en el Plan de Expansión 2024 o se posterga, no son concluyentes".
En definitiva, "el Panel estima que el Proyecto HVDC contemplado en el Informe Técnico Final no debe ser incluido en el Plan de Expansión 2024, ya que considera que es necesario contar con una evaluación más acabada de alternativas, así como con estudios adicionales de las características técnicas y económicas de las alternativas analizadas, y de la cuantificación de sus impactos sistémicos".
Consultado por DF, desde la CNE manifestaron su pleno respeto a la decisión del Panel de Expertos y destacaron que, en este mismo proceso, 9 de las 12 discrepancias presentadas fueron resueltas favorablemente para la Comisión, lo que -dijeron- "reafirma la solidez técnica de nuestro trabajo".
Y reconocieron: "Reafirmamos nuestra convicción técnica de que este proyecto tiene un rol estratégico para la seguridad operativa del sistema, el alivio de congestiones proyectadas y la integración de energías renovables, quedando por definir su momento óptimo de entrada en operación. En este sentido, seguiremos evaluando sus fundamentos y ajustando oportunamente la planificación de la transmisión conforme al dictamen del Panel, con el objetivo de asegurar un desarrollo eléctrico eficiente y sustentable para el país".
Es decir, la entidad se abre a ajustes para insistir en esta iniciativa tras el dictamen del Panel.
Si bien no son aludidos directamente, en Colbún vieron este tema con interés porque consideran que el proyecto no cumple con los criterios de sostenibilidad, eficiencia y seguridad que necesita el sistema eléctrico para su desarrollo.
En el escrito que presentaron en abril, Colbún incluso recordó el apagón: "A la luz de lo acontecido (...) se ha relevado la necesidad de priorizar la implementación de medidas regulatorias que tiendan a promover la seguridad del suministro eléctrico del país. A partir de ese suceso, es recomendable que el proyecto sea evaluado de manera más integral sobre su aporte en seguridad y tener presente esta clase de sucesos, ya que hoy posee una deficiente evaluación en términos económicos y tampoco posee una justificación en términos de aporte a la seguridad del sistema”.
Añadió en ese momento que la CNE busca iniciar un camino que exige una inversión sobre los US$ 1.500 millones, “pero ni siquiera queda claro cuál es su real aporte. Al menos, en materia de seguridad, no lo poseería”.
El debate que generó el dictamen
Acenor, quien también discrepó por el proyecto en el Plan de Expansión 2024, estimó que se debiera aplazar la inclusión de la iniciativa, ya que su entrada en operación en el año 2038 presentaría mayores beneficios para el sistema. Según el gremio, el Panel acogió la mayoría de las discrepancias que presentaron, incluyendo la exclusión de Lo Aguirre-Entre Ríos.
"Esta decisión es especialmente relevante para todos los clientes, que finalmente financian la infraestructura de transmisión a través de las tarifas eléctricas, y por lo tanto todas las obras tienen que justificarse técnica y económicamente", señaló a DF el director ejecutivo del gremio, Javier Bustos.
Según destaca Bustos, el dictamen concluyó que no existen antecedentes técnicos ni económicos suficientes, ni experiencias internacionales comparables, que respalden la incorporación de esta obra en esta etapa. "Como indica el Panel, de conformidad con la información de diversas fuentes tenida a la vista, si bien existe una amplia experiencia internacional en instalaciones HVDC, no se observa la existencia de proyectos suficientemente homologables al analizado, que estén actualmente en operación (ya sea en líneas aéreas que cubran distancias similares y con el mismo nivel de capacidad)", indicó.
El dirigente añade que la magnitud del proyecto exige varios estudios adicionales que demuestren que entregará beneficios netos superiores frente a otras alternativas más costo-eficientes. Por lo mismo, dice, "su eventual reincorporación no es sencilla: requiere análisis complementarios que garanticen su incorporación en el sistema y para los usuarios finales".
Sin embargo, el director ejecutivo de la Asociación de Transmisoras de Chile, Javier Tapia, es crítico: “La exclusión de la línea HVDC Lo Aguirre-Entre Ríos del Plan de Expansión 2024 no es una buena noticia, pues se trata de una obra fundamental para el futuro energético del país. Esperamos que pueda ser repuesta prontamente en el siguiente plan, considerando los estudios y recomendaciones que el propio Panel sugirió para robustecer el análisis".
"Más allá de este caso puntual, lo relevante es avanzar hacia mejoras en el proceso de planificación, de manera que no sea el Panel de Expertos la instancia donde realmente se dé la conversación sobre la pertinencia de las obras y la calidad de los estudios. Instancias previas de intercambio, que podrían darse en el marco de una planificación bianual, por ejemplo, permitirían un análisis más profundo y consensuado, entregando mayor certeza al desarrollo eléctrico del país", enfatizó.