En Santiago, los barrios y comunas de escasos recursos son los menos privilegiados con áreas verdes o espacios públicos de calidad.
Teniendo en cuenta esta premisa, y con el fin de recuperar áreas verdes para estas zonas, Fundación Mi Parque implementó un innovador modelo de gestión, que integra a la comunidad, municipalidad y empresas.
“Para lograr un proyecto exitoso tenemos que lograr que los vecinos que viven en torno a la plaza sienta este espacio como propio. Este sentido de pertenencia se genera a través de la participación de la comunidad en todo el proceso de recuperación de áreas verdes”, sostiene Ignacio Lira, subdirector de la Fundación.
Por ello, a los vecinos se les integra en las etapas de diseño y construcción. Por su parte, empresas privadas aportan con recursos y con voluntariado corporativo. Finalmente, el municipio se compromete a la mantención de las áreas verdes recuperadas y presta apoyo logístico a lo largo del proyecto.
Actualmente la fundación tiene 18 proyectos construidos en regiones.
“Poco a poco queremos ir expandiendo nuestro trabajo al resto del país, creemos que es importante que en todo Chile nos sintamos orgullosos de los barrios donde vivimos”.
La entidad sin fines de lucro fue elegida para ser asesorada de forma gratuita por el programa Applied Management Research (AMR), de la Universidad de California Los Angeles (UCLA).
Un equipo de la universidad viajará a Chile para dar asesoría a la fundación para conseguir financiamiento permanente y fortalecer la organización vecinal y sus redes de gestión.
Los próximos proyectos están en Colina y Pudahuel.