Tras no ser seleccionada por Enami para desarrollar la producción de litio en Salares Altoandinos, dado que la estatal optó en su lugar por la gigante Rio Tinto para tal tarea, la francesa Eramet pasó a la acción. En el 1° Juzgado de Letras de Copiapó, la europea ingresó en julio diversos escritos para constituir servidumbres mineras por 283 concesiones que en total abarcan una superficie de 80.000 hectáreas en la zona de Salares Altoandinos, en concreto en las cuencas Aguilar, La Isla, Grande, Agua Amarga y Piedra Parada.
Tal como lo señalan los documentos legales, todo esto es parte de un proyecto mayor donde Eramet es titular de un total de 361 concesiones mineras constituidas, abarcando una superficie global aproximada de 101.419 hectáreas.
Con esto, señalan expertos, el grupo francés puede bloquear la inversión de Enami y Rio Tinto. “La servidumbre te da acceso al suelo y la posibilidad de defenderte si, entre otras opciones, te pretenden instalar líneas o proyectos de energía”, ejemplifica el abogado Cristián Quinzio, de Quinzio Plc.
En mayo pasado, Enami eligió a Rio Tinto como el socio operador para Salares Altoandinos, con una inversión de capital estimada por las partes de US$ 3.000 millones, sujeta al desarrollo de los estudios.
El proyecto cuenta con más de 15 millones de toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE) en la zona de los salares Aguilar, La Isla y Grande, posicionándose como la iniciativa greenfield con mayor cantidad de recursos de litio en Chile.
Esta decisión no dejó contenta al grupo galo, que analiza acciones legales contra el Estado de Chile, luego de haber invertido US$ 100 millones en adquirir propiedad minera en la zona, además de gastar unos US$ 20 millones en realizar prospecciones geológicas en el complejo salobre situado en la Región de Atacama.
Esta estrategia fue adelantada a inicios de septiembre por, el vicepresidente senior del negocio del litio de Eramet, Jean-Baptiste Hogard, quien en un foro sectorial expresó que el grupo minero francés va a defender su posición en Chile.
El Estado francés posee el 27% del capital de la empresa minera, siendo el principal accionista individual de la misma.
La estrategia de Eramet es considerada como una apuesta de alto riesgo por Enami. Cercanos a esta empresa hicieron ver que si en el curso de un proceso judicial se prueba que esa compañía tenía como intención bloquear la inversión de Enami y Rio Tinto, "hay un costo muy alto para la empresa".
Eramet deshizo sociedad con Codelco
El 3 de septiembre de este año, mediante una resolución del Ministerio de Minería, Eramet oficializó que salió de la sociedad que tenía con Codelco y Quiborax para explotar el Salar de Ascotán, en el marco del proceso de “fast track” para obtener Contrato Especial de Operación de Litio (CEOL) activado por el Ejecutivo. Con ello, la cuprera estatal y la productora de bórax quedan solas en la sociedad.
Tal jugada se debió, señalan en el sector, a que dados los conflictos potenciales de Eramet con Enami -que pueden derivar en una demanda contra el Fisco- habría existido de parte de Codelco inquietud, dado que esta compañía también es de propiedad estatal. "No podía Eramet estar, por un lado, asociada con Codelco, que es estatal, y por otro lado, en pelea legal con Enami, que también es estatal", dijo un conocedor del caso.