Oferta de Cermaq a Cultivos Marinos Chiloé sería por unos US$ 140 millones

C.Mejías/ J.Catrón



En manos de Cultivos Marinos Chiloé (CM Chiloé), controlada por el empresario José López, se encontraría la decisión de venta de la empresa a la noruega Cermaq, que tiene presencia en Chile a través de su filial Mainstream y de la firma de alimentos Ewos. La oferta de compra está hecha y rondaría los US$ 140 millones. El monto es levemente superior a la deuda que la empresa nacional mantiene con la banca, por lo que la ganancia por la operación sería muy baja.

Fuentes conocedoras de las negociaciones señalan que la chilena adeuda entre US$ 110 millones y US$ 120 millones a diversas entidades financieras, con las cuales está intentando negociar.

El objetivo sería hacer una “quita”, ofreciéndole a los bancos pagar la deuda con el dinero que obtenga de la venta, pero que éstos le rebajen el monto total. Así CM Chiloé obtendría dinero de la transacción. Ante esto los bancos han respondido con una negativa rotunda, pero desde la empresa local continúan buscando fórmulas.

La oferta de Cermaq fue realizada hace algunas semanas y tiene fecha de caducidad para que su contraparte tome una decisión: 60 días, que culminan antes de que termine el mes de septiembre.




Contexto


El tiempo avanza para que se firme la compraventa. Mientras, al interior de la firma nacional se realizó ayer una junta ordinaria del directorio.

De acuerdo a lo informado por la propia empresa ante la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), “se ratificó la información entregada previamente por la gerencia general respecto a que los actuales propietarios de las acciones de Cultivos marinos Chiloé se encuentran en negociaciones con Cermaq”.

En el texto, firmado por José López, agregan que “el directorio ha sido informado por los propietarios de las acciones de la Sociedad que aún existen una serie de materias que se encuentran en conversaciones con Cermaq y que aún no han sido resueltas”.




Antecedentes


Cultivos Marinos Chiloé tenía pensado debutar en bolsa hacia fines de junio pasado. Sin embargo, la operación fue descartada, en ese el momento, dada la complicada situación que vive el sector actualmente.

La decisión de los controladores, la familia López Huneeus, se produjo luego de haber tenido un road show de tres semanas con inversionistas (no retail), en el que se dieron cuenta que la gran piedra de tope para concretar la apertura era uno sólo: el precio.

Luego, a mediados de julio la empresa confirmó las negociaciones con Cermaq, aunque aclaró ante la SVS que aún hay “sustanciales incertidumbres” respecto al cierre de la transacción.