Las nuevas peticiones semanales de subsidio por desempleo aumentaron en 25.000 la semana pasada en Estados Unidos hasta las 410.000 ajustadas por temporada, informó hoy el Departamento de Trabajo.
El dato superó las expectativas del consenso de analistas, que esperaba que la cifra quedase situada en torno a las 400.000.
La media semanal de cuatro semanas, un indicador considerado más fiable al ser menos volátil, aumentó en 1.750, hasta los 417.750 la pasada semana.
La cifra de personas que recibe algún tipo de ayuda regular por desempleo se situó en 3,91 millones de personas a principios de este mes.
Otros 4,5 millones de estadounidenses desempleados de larga duración reciben también ayuda después de que el Gobierno extendiese el derecho de estos a percibir el subsidio.
Las solicitudes de ayuda por desempleo están muy por debajo del récord de 651.000 alcanzado en marzo de 2009, cuando la economía estadounidense estaba en plena recesión.
Una cifra por debajo de 425.000 se considera una señal de un modesto crecimiento laboral, pero los economistas consideran que el dato tiene que mantenerse de forma consistente en 375.000 o por debajo de esa cifra para indicar una caída estable en la tasa de desempleo.