El Congreso de Estados Unidos podría votar “como pronto” hoy
el plan de rescate de US$ 15.000 millones para evitar la quiebra de las tres
grandes automotoras de Detroit, General Motors, Ford y Chrysler, una votación
que también podría tener que recibir el visto bueno del Senado.
Según fuentes oficiales, la Casa Blanca y los
demócratas pretenden encontrar un acuerdo lo antes posible en lo que se refiere
a los préstamos que se pretenden conceder para salvar del colapso a la
industria del automóvil. "El trabajo duro de los dos partidos ha
funcionado", ha dicho el senador demócrata de Michigan, Carl Levin, quien
reconoce que ha sido alcanzado un acuerdo.
General Motors y Chrysler, las compañías más acuciadas por
la crisis, han manifestado recientemente que necesitaban al menos 14.000
millones de dólares para continuar siendo operativos hasta finales de marzo.
Desde el pleno del Senado, el líder de la mayoría demócrata,
Harry Reid, ha precedido que el acuerdo con la Casa Blanca sobre el
préstamo de emergencia para las empresas "esta noche o mañana". Reid
ha reconocido que aún quedan "dos asuntos principales" que resolver
en estas negociaciones iniciadas el viernes para lograr una solución
consensuada, sin embargo, ha dicho que esperan "completar el trabajo entre
esto esta noche o mañana".
La Casa
Blanca y los republicanos exigen que sólo se inyecte dinero a
las empresas que demuestren «viabilidad» a largo plazo.
Reid prevé realizar consultas con el líder de la minoría
republicana, Mitch McConnell, y no está claro aún si la votación del plan
comenzará en el Senado o en la Cámara de Representantes.