AT&T va a enfrentarse directamente a Carlos Slim en México después de realizar una inversión masiva de 4.3 mil millones de dólares para adquirir a la competencia, con planes para realizar una mayor inversión en los siguientes tres años conforme intenta convertirse en el líder del mercado dentro de la siguiente década.
"Tenemos mucho trabajo por delante", dijo Thaddeus Arroyo, director ejecutivo de AT&T México al Financial Times, una semana después de que los reguladores aprobaron la adquisición de Nextel por su compañía por 1.9 mil millones de dólares. Esto fue después de que adquirió Iusacell por 2.5 mil millones de dólares, a principios de este año.
El sector de telecomunicaciones en México está dominado por América Móvil de Slim, cuya unidad Telcel tiene siete de cada 10 líneas telefónicas. AT&T es todavía pequeña en el mercado. Estas adquisiciones le dieron cerca de 11 por ciento de participación del mercado, pero apenas tiene cerca de la mitad de suscriptores que Telefónica, la compañía española que ocupa el segundo lugar en el mercado. Aun así, le permitirán a AT&T rebasar a Telefónica en términos de ingreso y tener la tarifa promedio más alta por usuario en el país.
Arroyo ve cinco años de inversiones "considerables" – declinó revelar la cantidad – para poner al día su red y ofrecer servicio impecable a ambos lados de la frontera dirigido a expatriados latinoamericanos en EEUU y sus familiares en México.
"Vamos a entrar en un período de inversiones fuertes. Estamos invirtiendo para el futuro en un horizonte de largo plazo y eso se verá reflejado en nuestro resultados", dijo Arroyo.
"Los primeros cinco años serán de gran inversión," dijo, con un enfoque particular en los primeros tres, en los que la compañía espera crear una mayor base de usuarios sobre la cual poder establecer el liderazgo en la industria dentro de la siguiente década.
Pero Arroyo añadió que "hasta en los primeros dos años tendremos un progreso sustancial en términos de elevar la experiencia en México y crear una posición atractiva para que los clientes utilicen más a AT&T".
La compañía ya cuenta con el mayor espectro de bandas en México y Arroyo dice que tiene la intención de "usarlo para crear más competencia".
El gobierno lanzó una reforma en el sector de telecomunicaciones para alentar mayor competencia. Ésta incluyó forzar a América Móvil a conectar gratis las llamadas de su competencia a través de su red. Pero eso disminuyó los márgenes y Slim anunció el año pasado que vendería activos para reducir su participación en el mercado debajo del 50 por ciento.
La compañía ha dado marcha atrás desde entonces, confirmando en una llamada en conferencia de resultados el mes pasado lo que había estado dejando ver desde hace un tiempo: que tal vez no venderá nada después de todo.
AT&T había sido visto inicialmente como un comprador natural, ya que había sido un inversionista desde hace mucho en América Móvil, hasta que redujo su participación de 8 por ciento el año pasado para asegurar la aprobación regulatoria de su adquisición por 48.5 mil millones de dólares de DirectTV.
Pero Arroyo dijo: "Tenemos las manos llenas con lo que tenemos".
AT&T también tiene otras restricciones de capital, incluyendo la compra de $18.2 mil millones de dólares de licencias de espectro del gobierno de EEUU.
Todo es parte del esfuerzo para evolucionar de ser una compañía que obtiene tres cuartas partes de su ingreso de los consumidores de teléfonos móviles en EEUU – un mercado envuelto en una guerra de precios que está siendo ganada por los competidores más pequeños – a una que genere la mayoría de sus ventas del sector inalámbrico mexicano, de servicios para negocios y de videos del consumidor.
DirectTV tiene 41 por ciento de acciones en Sky México, cuyo socio mayoritario es Televisa, la compañía de difusión líder de México. Pero Arroyo no ve la urgencia de entrar al campo del video. "Nuestro objetivo a corto plazo es ejecutar nuestra visión inalámbrica", dijo. "Estamos enfocados en crear los cimientos".